No cayó un meteorito ni un OVNI se estrelló contra el suelo, sino que cedió la vereda de una manera increíble y se formó un gran cráter.
Por razones que se desconoce, una gran parte de asfalto se cayó y los vecinos solicitan intervención urgente antes de que ocurra una tragedia.
Lo que sucede es que allí no hay buena iluminación y los vecinos con algunas ramas y cinta de peligro lograron señalizar el hueco, pero no es nada seguro. Temen que algún transeúnte o alguien en bicicleta caiga allí, además de que el pozo abierto dificulta la circulación.
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