El ex Boca entró sobre el final y fue determinante. Chiqui Tapia estuvo en el estadio para ver jugar a su hijo Iván, refuerzo del Ciclón.
Cuando parecía que San Lorenzo y Lanús confirmarían el último grito de la moda en la Copa de la Liga Profesional, Ricardo Zielinski movió el banco y consiguió destrabar un partido que parecía encaminarse al 0 a 0. A Walter Bou le alcanzaron los 20 minutos que estuvo en cancha para cambiar el partido, meter dos goles y darle los primeros tres puntos en el año que el Granate deberá mejorar su promedio.
Bajo un sol abrasador –los bomberos refrescaron al público- el partido se excedió en pelotazos y tuvo carencias creativas en las propuestas que intentaron plantear Ruben Insua y el Ruso Zielinski. Con la expectativa puesta en los refuerzos, fue el Granate quien tuvo un mejor balance.
El presidente de la AFA, Claudio Tapia, estuvo presente en el Bajo Flores. Si bien es verdad también estuvo el viernes en la de Lanús dónde Barracas Central fue local en el 1 a 1 ante Vélez, estuvo en un palco del Nuevo Gasómetro para ver el debut de su hijo Iván, que pasó del Guapo al Ciclón.
En medio de un partido de pocas ideas, y situaciones inocuas, el empate explicaba la poca ambición de los equipos con poca vocación de ataque. En ese contexto, Facundo Altamirano se erigía como la figura porque respondía bien a las ínfulas de Lanús que llegaba con mayor claridad que el local.
Las modificaciones de Zielinski fueron fundamentales para explicar el triunfo de Lanús. En la apertura del marcador participaron tres jugadores que comenzaron el partido desde el banco. Faltaban cinco para el final y Bou comenzó una jugada que abrió al costado derecho y continuó Agustín Rodríguez, quien mandó el centro que encontró en el área a Jonathan Torres. De primera, este descargó para que el delantero sacara un derechazo cruzado que se metió junto al palo derecho de Altamirano. Golón.
Fue un deja vu para los hinchas de Lanús. Bou entró con la nueve en la espalda, la que José Sand tuvo a su nombre hasta el año pasado, cuando se retiró. El entrerriano le rindió un tributo a Pepe y fue por más.
El gol no le dio tiempo a San Lorenzo para hacer algo distinto y, por el contrario, encendió a Lanús que seis minutos más tarde amplió la diferencia. En esta ocasión Eric Remedi, otro debutante para Insua, perdió la pelota en el medio –Bou le ganó la espalda- y la jugada terminó en el segundo tanto. Panterita avanzó con la pelota dominada y remató con clase.
No quedó tiempo para más. Lanús se despertó en el final y fue letal. San Lorenzo, que no había logrado hacer la diferencia durante la igualdad, se quedó sin herramientas después del doblete de Bou. Insua deberá intensificar el trabajo de su equipo en reconstrucción para dar vuelta de página el miércoles, en Córdoba, ante Belgrano.
El Granate sumó tres puntos que lo ponen al tope de la tabla en la primera fecha, pero que le sirven más pensando a futuro: debe mejor el promedio, ya que de los equipos que dividen por tres temporadas, tiene junto a Vélez el peor coeficiente.
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