Se espera que este viernes José Miguel Gerala y un hombre de apellido Medina, sean imputados por el juez de Garantías de Orán, Gustavo Montoya.
Tras los allanamientos y la incautación de 150 rieles robados, armas, municiones y varios millones de pesos, la justicia tiene en la mira al intendente de Morillo Atta Gerala. Por eso esta tarde se llevó a cabo la detención de dos personas y uno de ellos es el hijo del mencionado jefe comunal, además de otro hombre de apellido Medina.
El hijo del intendente es José Manuel Gerala y su detención se produjo en el domicilio de este. Ahora se espera que Gerala (h) y Medina sean imputados por el juez de Garantías de Orán, Gustavo Montoya, este viernes.
Cabe recordar que este jueves el personal de la Dirección General de Aduanas, junto a la Gendarmería Nacional (GNA), logró desarticular una banda dedicada al contrabando de rieles de ferrocarril y otros materiales. En total, se secuestraron más de 150.000 kilogramos de metales, más de 150 rieles de ferrocarril que fueron sustraídos utilizando materiales de corte de las municipalidades, armas, municiones, vehículos y varios millones de pesos en efectivo, con un avalúo total que asciende a más de $380.000.000. Además se secuestró documentación de interés para la causa.
La hipótesis de los investigadores
Gerala figura como el principal investigado en el caso. La medida fue solicitada por el fiscal general Eduardo Villalba y autorizada por el magistrado Montoya, en el marco de una investigación sobre el robo de rieles en la región.
La hipótesis que manejan los investigadores es que integrantes de comunidades originarias habrían actuado como ejecutores. Según se plantea, los rieles sustraídos serían trasladados a Bolivia, donde el botín sería reducido y comercializado.
La investigación, que se inició a partir de una denuncia recibida hace varios meses, generó una serie de diligencias probatorias que culminaron en el allanamiento de varios inmuebles en el norte salteño, incluyendo la propiedad del jefe comunal. Para esta tarea se movilizó personal de Gendarmería Nacional y de la Dirección Regional Aduanera Noroeste, quienes trabajaron bajo directivas del fiscal Villalba.
Fuente: El Tribuno
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