El Pontífice quiso saludar a los feligreses desde el vehículo, pero debió hacerlo en silla de ruedas por sus problemas de movilidad. Poco antes, no pudo leer nuevamente su discurso por sus dificultades respiratorias y lo cedió a un asistente.
Bergoglio pidió nuevamente asistencia para subir por la pequeña escalera al papamóvil cuando se habla de problemas respiratorios y de movilidad.
El papa Francisco celebró este miércoles la audiencia general en la plaza de San Pedro, y no en el interior del aula Pablo VI, a pesar de la fría mañana en Roma, y de nuevo no leyó la catequesis que tenía preparada, sino que lo hizo un colaborador porque afirmó que sigue resfriado. Al malestar respiratorio se sumó la imposibilidad de subirse al Papamóvil por sus propios medios, un momento que quedó registrado por la prensa.
Francisco arrastra desde hace más de una semana un resfriado que le ha hecho cancelar algunos actos y por el que el pasado el miércoles, tras la audiencia general, acudió al hospital Gemelli de la isla Tiberina, en el centro de Roma, para realizarse estudios.
Aunque el pontífice retomó normalmente su agenda, sin embargo no ha leído sus discursos porque asegura que se cansa cuando tiene que leer mucho, aunque sí pronuncia sus llamamientos.
Al malestar respiratorio se le suman sus problemas para trasladarse, que lo acompañan desde hace algunos años. Este miércoles se pudo ver que intentó subirse al Papamóvil por sus propios medios, pero finalmente desistió por no poder.
El pontífice solicitó la ayuda a sus custodios, quienes le acercaron una silla de ruedas para recorrer el perímetro del vallado que lo separa de los feligreses que todos los miércoles acuden a la audiencia.
El Vaticano confirmó que Francisco presidirá todas las celebraciones de Semana Santa
Pese a los problemas de salud que lo aquejan, el Vaticano ha confirmado este miércoles la presencia del Papa en todos los actos de la Semana Santa, desde el Domingo de Ramos del 24 de marzo al 31 de marzo, con la misa de Resurrección.
Francisco acudirá el 28 de marzo a la cárcel de mujeres de Rebibbia, en Roma, para celebrar la misa del Jueves Santo y el tradicional lavado de los pies a las reclusas, como ya ha hecho en otras ocasiones en una tradición de cuando era arzobispo de Buenos Aires.
Además, el Vaticano confirmó la celebración de la misa del 24 de marzo, del Domingo de Ramos, que conmemora la entrada de Jesús en Jerusalén a las 10.00 horas locales, mientras que el 28 de marzo, Jueves Santo, también en la basílica vaticana, celebrará la Misa Crismal a las 9.30 horas, día en el que los sacerdotes renuevan sus promesas.
El Viernes Santo tendrá la habitual doble cita con la celebración de la Pasión del Señor a las 17.00 horas en San Pedro y luego a las 21.15 horas el tradicional vía crucis en el Coliseo de Roma, donde no estuvo el año pasado debido a que se encontraba en proceso de recuperación e hizo un frío intenso esa noche.
En la tarde del 30 de marzo, Sábado Santo, a partir de las 19.30 horas se celebrará la Vigilia. Por último, el Domingo de Resurrección está prevista la misa en la plaza de San Pedro a las 10.00 y luego a las 12.00 subirá a la logia central de la basílica para impartir la bendición Urbi et Orbi.
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