La mujer fue asesinada el 21 de septiembre de 2006 en Salvador Mazza y por el hecho ya hubo condenados. Sin embargo, nunca se juzgó a los hermanos Castedo, acusados de ser los autores intelectuales del homicidio.
En el juicio que se desarrolla todos los miércoles en los tribunales federales de Salta por asociación ilícita y lavado de activos en contra de Raúl y Delfín Castedo, el fiscal Carlos Amad, solicitó que se sume a la causa el homicidio de Liliana Ledesma ya que es un “crimen del narcotráfico”. Sin embargo, los jueces rechazaron el pedido.
La decisión de los magistrados devino en respuesta a un planteo de competencia formalizado por el fiscal general Carlos Martín Amad, de la Unidad Fiscal Salta, en el juicio que se sigue contra ambos hermanos, Mabel Araujo, ex mujer de Delfín Castedo; los comerciantes Alberto, Luis y Mario Alberto Yudi; y el martillero público Eduardo Torino, quienes están acusados de conformar una asociación ilícita y realizar maniobras de lavado de activos de origen delictivo.
Al fundamentar su pedido, Amad sostuvo que a lo largo del debate (iniciado el 3 de noviembre de 2021) se han escuchado ya numerosos testimonios que vinculan el crimen de Ledesma con los hermanos Castedo. “Nunca se probó una relación tan estrecha entre ambas causas”, afirmó.
Mencionó, en ese sentido, a varios testigos que, al declarar ante los jueces, admitieron sin tapujos las amenazas que Liliana Ledesma recibió de parte de los acusados, las cuales se cumplieron con el asesinato a cuchilladas de la mujer.
“Está probado que todos estos hechos son producto de una mafia del narcotráfico que, en sus inicios, era dirigida por el diputado provincial Ernesto Aparicio (fallecido), socio de los principales acusados de este juicio”, resaltó.
Agregó que no sólo las testimoniales de puesteros, vecinos y familiares de Ledesma prueban la relación con los Castedo, sino también varios informes que reflejan diversas escuchas telefónicas. En una de ellas, los Castedo se referían a la puestera como “negra de m…”.
Descartó que el enfrentamiento entre la víctima y los jefes del clan responda a un conflicto de tierras. “Liliana Ledesma representaba un peligro exponencial para los acusados, pues era la única que denunciaba su verdadera actividad dentro de la finca, la que no era otra que el tráfico de drogas”, indicó.
Por ello, Amad insistió en que la muerte de la puestera fue como consecuencia del narcotráfico. “Ella les molestaba, en especial porque no se callaba y exponía ante los medios lo que sucedía dentro de la finca. Por eso, primero decidieron cerrar los caminos de servidumbre, problema que después de la muerte de la puestera, llamativamente desapareció”, explicó.
Agregue un Comentario