Funcionarios provinciales desmintieron que esa obra, realizada a pedido de las comunidades, el municipio y la cartera de Turismo Provincial para preservar el lugar, sean causa de los cambios que se observan en las fotografías.
Desde hace muchos años, una enorme cantidad de turistas se da cita en los Ojos de Mar de Tolar Grande. Para llegar al lugar, solían utilizar vehículos de gran porte que dejaban secuelas en el terreno perimetral.
Por este motivo, y para preservar los cuerpos de agua, la Municipalidad de Tolar Grande, la Comunidad Kolla de Tolar Grande, entre otros actores, con la anuencia del Ministerio de Turismo y Deportes, solicitaron la intervención del Gobierno Provincial. Pedían una plataforma que posibilitara a los turistas llegar a pie, pero dejando las camionetas lejos.
Para esto se requirió la intervención de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, y se desplegaron los correspondientes estudios de suelo, de factibilidad, impacto social y ambiental, los cuales cumplidos los protocolos correspondientes, establecieron la conveniencia y factibilidad de la obra, y cuál es la cantidad de peso que el suelo podía sostener: 11 toneladas por metro cuadrado.
“La obra que se hizo tiene un peso que no llega al tercio de lo permitido. Y antes de hacerla se hicieron estudios a distintas profundidades de ese suelo”, explicó Alejandro Aldazabal, secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable por Profesional FM.
Hay otro detalle más, los durmientes con los que se construyó la plataforma actualmente están al mismo nivel. Esto indica que no hubo un hundimiento que pudiera impactar en los cuerpos de agua.
“Se tuvo tanto cuidado, que se trasladaron los durmientes y el hormigón en carretilla, dejando los vehículos, que eran vagonetas de anchas ruedas, cerca de la ruta. Justamente esto se hizo para evitar compactar”, reafirma Aldazábal.
Tampoco hay ninguna evidencia científica de que hayan desaparecido o muerto los extremófilos. La Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable dispuso una investigación científica para verificar la veracidad de la denuncia y también para establecer cuáles son las causas de los cambios que se ven en las imágenes captadas por drone.
“Las primeras indagaciones técnicas dieron cuenta de que subió el nivel de agua que tenían los ojos de mar. No podemos desconocer el impacto del Cambio Climático, es una variable también a estudiar. Tenemos un ejemplo muy cercano en un ecosistema similar, como el Lago Titicaca, que tuvo un bajante muy preocupante la primavera pasada”, razonó el funcionario.
“Los movimientos sísmicos son otra variable. De todas maneras, seguiremos averiguando si hay causas humanas detrás del cambio que se ve en las fotografías y que pudieron constatar nuestros técnicos”, explicó Aldazábal.
Fuente: FM Profesional
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