Los informes preliminares hablan de un roce causado por los pozos de la ruta nacional 16. El chofer del ómnibus logró ponerlo en la banquina. La cabina del camión se desarmó.
Cincuenta y cuatro personas que viajaban a bordo de una unidad del transporte interurbano de pasajeros salvaron la vida ayer tras una fantástica maniobra del conductor de un ómnibus, quien logró que la pesada unidad con el pasaje completo se detuviera sobre unos pastizales tras colisionar de costado contra un camión de cargas generales. El siniestro, que movilizó el protocolo de accidente de gran magnitud, estuvo signado por la buena suerte, ya que el conductor del camión, cuya cabina quedó destrozada, resultó con lesiones de consideración, pero que no pusieron en riesgo su vida, según informó El Tribuno.
El accidente vial se produjo sobre ruta 16, altura del km 700, entre un coche de la empresa La Veloz del Norte, interno 912, marca Mercedes Benz, que tenía como destino El Quebrachal.
El micro colisionó accidentalmente y en el mismo sentido contra la cabina de un camión marca Iveco, con acoplado. Algunos relatos de pasajeros obtenidos mostraron que el ómnibus estaba sobrepasando al camión cuando el mismo giró hacia su izquierda al encontrar un pozo de regulares dimensiones que hizo que la cabina se moviera hacia ese costado siendo la misma rozada por el techo del colectivo que inmediatamente se desplazó hacia el carril contrario donde el chofer pudo finalmente dominar la máquina sobre los pastizales.
“Más que el impacto el ‘barquinazo’ que dio el colectivo fue lo que desacomodó a los pasajeros, algunos de ellos resultaron lesionados aunque no de gravedad. En la nómina acercada por la empresa están Noemí Ruiz, de El Galpón, Jonathan Villalba, de Gaona, y Rosalía del Valle Helguera. La sargento Mariela Noemí Saravia, con revista en subcomisaria El Quebrachal, se hallaba a bordo y se lesionó el brazo izquierdo pero prefirió quedarse en el lugar para ayudar y calmar a los pasajeros.
Los conductores fueron identificados, el del colectivo era Ricardo Eduardo Rueda, en tanto que el del camión era Juan José López, de Córdoba.
El accidente que pudo ser trágico, según fuentes policiales, puso en práctica los protocolos para grandes catástrofes, tanto de la Policía como de la emergencia médica.
En ese contexto, desde las oficinas de la empresa La Veloz del Norte se informó al instante de la contingencia y, según su vocera de prensa, Mercedes Beltrán, se puso todo a disposición para que los lesionados leves fueran atendidos de urgencia y los pasajeros que resultaron ilesos pudieran llegar a su destino sin más demoras que las que el mismo accidente había producido.
“Apenas nos llegaron las noticias la empresa envió una segunda unidad para asistir a los pasajeros y disparamos el protocolo interno para diagramar, junto con la policía y los servicios de emergencia, la ayuda sanitaria inmediata”, dijo Beltrán. “Sabemos que hubo en total cinco heridos leves, tres de los cuales fueron trasladados al hospital de Metán y dos con atención en J. V. González y El Quebrachal. Lo único que sabemos es que el roce de los transportes se produjo en una zona poceada de la ruta y por suerte la unidad que transportaba a 53 pasajeros no sufrió daño alguno”, señaló la vocera de prensa de la empresa.
Todos los hospitales
Fuentes policiales de la zona confirmaron que, ni bien se tomó conocimiento de la colisión, todos los hospitales zonales fueron advertidos sobre el posible ingreso de heridos.
La fuente aseguró que la escena parecía realmente grave pero que, por suerte y por la pericia de los conductores, se minimizaron los lesionados.
Al lugar acudieron ambulancias de J. V. González, El Quebrachal, Galpón y Metán.
La empresa asegura que solo cinco personas resultaron levemente lesionadas, entre ellas dos mujeres, una de ellas, embarazada en tanto que la otra es una policía.
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