Luna pesó 3 kilos y 320 gramos y recibió el alta médica en el Materno Infantil ayer al mediodía. Su padre entregará hoy las filmaciones del parto, en plena calle, a la Policía.La beba que nació el jueves pasado por la noche en la vereda del hospital Papa Francisco luego de que a su madre, Matilda, que estaba en pleno trabajo de parto, le negaran la atención, ya recibió el alta médica y se encuentra en su casa con su familia. Ambas fueron víctimas de violencia obstétrica. La pequeña sufrió una fractura de clavícula.
Sergio, su padre, contó ayer a El Tribuno que «Lunita está bien gracias a Dios. Pesó 3 kilos y 320 gramos. Recién acabamos de llegar del hospital a casa. Le dieron el alta pasado el mediodía (por ayer). El sábado sí estábamos tristes porque no la teníamos a ella en casa, pero ahora estamos contentos por poder estar todos juntos con los chicos. Fue lindo volver».
Matilda se encuentra en buen estado de salud, aunque «un poco dolorida», según contó su esposo y hasta el momento no habla ni recuerda el traumático hecho de la noche del jueves. «No quiere decir nada ni acordarse y nosotros le respetamos sus tiempos y entendemos que no quiere hacerlo», dijo Sergio.
Explicó que los médicos del hospital Materno, donde estaban internadas Matilda y la beba, le dijeron que en los casos de fracturas en bebés no se les aplica yeso porque tienen huesos diminutos. «Me dijeron que el huesito solo se volverá a soldar y que ella va a estar mejor. En estos días tenemos que llevarla al control. Los controles van a ser en el Materno porque al Papa Francisco no nos quedaron ganas de ir nunca más», expresó.
La familia reside en el barrio Sanidad II, en la zona sudeste de la capital salteña y está compuesta por cinco chicos de entre 4 y 15 años. La pareja trabaja en el vertedero San Javier como recicladores. Matilda también tiene una nieta de su hija mayor.
Una filmación
La misma noche en que ocurrió el episodio, que quedó grabado en videos que se viralizaron, el hombre hizo una denuncia contra una recepcionista que les negó la atención y el hospital Papa Francisco por no tener personal capacitado. El caso tuvo amplias repercusiones: el Ministerio de Salud tomará medidas con el hospital y se ejecutará un plan para que vuelva a tener la función de origen: polivalente. En febrero se iniciaría.
Sobre el cambio en el hospital Papa Francisco, Sergio refirió: «Es lo mejor que cambien la modalidad y ojalá que cambien también al personal y que a esta persona que no nos quiso atender la echen de ahí. Fuimos maltratados por ella. No nos dio respuesta. Que vuelvan a atender como era al principio; hace años tenían buena atención, pero después ya no te atendían para nada».
Agregó que «ojalá que mi bebe más adelante no tenga nada grave, ninguna secuela, pero si llega a sufrir algo el día de mañana la señora esta o el personal del hospital Papa Francisco tendrá que hacerse cargo y darle una pensión o algo».
Al ser consultado sobre si recibió novedades con relación a la denuncia que hizo, manifestó que recibió una citación el sábado, por lo que hoy debe presentarse en una comisaría con el video en el que se ve a su esposa pariendo a la beba en la vereda del hospital y que trascendió las redes sociales e incluso los medios nacionales . «Tengo que llevar la filmación en un CD para entregar en la comisaría y voy a preguntar en qué quedó mi denuncia y quién se está haciendo cargo», precisó Sergio.
Añadió que ni la recepcionista, ni ningún profesional, ni referentes del hospital Papa Francisco les pidieron disculpas por lo que pasó. «No se nos acercaron en ningún momento, pero el ministro de Salud (Federico Mangione) sí se acercó a mi señora cuando estaba internada en el hospital Materno Infantil y a ella le pidieron disculpas», señaló.
Proyecto de ley
Desde el Observatorio de Violencia Obstétrica (OVO) Salta emitieron un comunicado en el que calificaron lo ocurrido como un trato «deshumanizado atroz» y subrayaron hechos que constituyen violencia obstétrica como la desatención por falta de recursos e infraestructura, el desinterés y deslegitimación de la palabra de la mujer, su invisibilización y la falta de preparación del personal de salud.
También destacaron que impulsan un proyecto de ley nacional de Capacitación Obligatoria al Personal de Salud en Violencia Obstétrica que ya tiene estado parlamentario y que esperan que sea sancionado para que llegue a todos los rincones del país y cese este tipo de violencia. El OVO trabaja desde 2018 para erradicar y visibilizar la violencia obstétrica en la provincia y hoy es parte de una campaña nacional.
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