La acusación que pesaba contra el ecuatoriano Cordova era por privación ilegítima de la libertad, violencia de género y abuso.
El femicida de Campo Quijano ya había estado preso por raptar, abusar y golpear a su novia de 17. Estuvo preso pero a los pocos días quedó en libertad. Fuentes judiciales afirmaron a Que Pasa Salta que en la causa intervinieron el fiscal penal de Rosario de Lerma, Gustavo Victor Ariel Torres Rubelt y la jueza de Garantías de 7° Nominación, María Edith Rodríguez de Galli.
La familia de la joven de 17 años nunca comprendió la decisión de la justicia. A los pocos días quedó en libertad y al femicida lo volvieron a ver por las calles de Campo Quijano.
El caso recayó en una Fiscalía de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual. La gravedad de los hechos por los que estaba acusado podían derivar en que le impusieran una prisión preventiva hasta llegar a juicio.
La situación dio un giro rapidamente. A los pocos días el ecuatoriano recuperó su libertad por la decisión de un juez.
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