El argentino campeón del mundo igualó el encuentro a los 92 minutos de partido, en un estadio repleto. Riqui Puig, ex compañero de la Pulga en Barcelona, falló un penal que atajó el arquero Drake Callender, figura en Las Garzas.
Tantas veces las redes sociales se han inundado de videos de las combinaciones ‘de memoria’ entre Lionel Messi y Jordi Alba que ya parece natural y lo extraño es que no ocurran cuando se juntan en un campo de juego. Este domingo, en la madrugada del lunes en la Argentina, el argentino campeón del mundo apareció en el minuto 92 para rescatar al Inter Miami y, tras una combinación de doble pared con el lateral español made in Barcelona, puso el 1-1 ante Los Ángeles Galaxy, en su segundo encuentro en la temporada de la MLS de Estados Unidos.
Le había costado muchísimo el desarrollo del partido a Las Garzas, en su primera excursión de la temporada lejos de Florida. Encabezados por la calidad de Riqui Puig, otro ex compañero en el conjunto culé, los máximos ganadores de la MLS encontraron la manera de desconectar al Inter: sacándole la pelota.
Pero la expulsión por doble amarilla de Marco Delgado a los 87′, un rato después que el serbio Dejan Joveljic había hecho explotar a los casi 27.000 fanáticos que llenaron el estadio Dignity Health Sports Park de la ciudad de Carson, a las afueras de Los Ángeles, modificó la tónica de un partido que ni la calidad de Messi había conseguido igualar.
Los errores no forzados en el manejo de la posesión en el conjunto de Florida fueron visiblemente superiores al debut del miércoles pasado ante Real Salt Lake. Pareció que el Galaxy salió decidido a ‘no respetar’ la jerarquía que imponen Messi, Alba, Sergio Busquets y Luis Suárez, otra vez desconectado y reemplazado tempranamente por Tata Martino, lo que provocó algunos insultos al aire del uruguayo.
Messi 🔗 Alba
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— Major League Soccer (@MLS) February 26, 2024
Dentro de esa desprolijidad que mostró el equipo del argentino campeón del mundo -que todavía no tuvo en el banco a la flamante incorporación Fernando Redondo-, Messi fue el más peligroso de la cancha, con dos remates de media distancia que obligaron a la intervención del arquero John McCarthy.
Del otro lado, Drake Callender volvió a ser la figura. Como durante el 2023 fue vital para la consagración en la Leagues Cup, en la tarde noche de Los Ángeles desactivó varias oportunidades de peligro, incluso un penal ejecutado por Riqui Puig a los 13 minutos, que podría haber modificado el desarrollo del juego.
Lo sufrió Inter Miami el partido, se dijo. Porque no era claro en la posesión, quedaba desarmado en el retroceso y la velocidad del uruguayo Fagundez, Puig y el ghanés Joseph Paintsil fueron un dolor de cabeza constante. Pero la efectividad en la finalización es tan importante como la gestación, y en eso falló el equipo dirigido por Greg Vanney.
Y en el peor momento del Inter Miami, el árbitro Gabriele Ciampi -a quien en varios pasajes le sobró el partido- expulsó del campo a Delgado. Las Garzas se envalentonaron y metieron contra su arco al Galaxy, que intentó resistir.
Pero a los 92 minutos, Messi primero quiso filtrar, se la entregó a Puig que ‘se la devolvió’ como si todavía jugaran juntos en el Barcelona. La Pulga lo agradeció de la mejor manera: construyó una doble pared espectacular en velocidad para el delirio de los fanáticos que habían ido a verlo a él. Entre ellos había otros GOAT’s como el tenista serbio Novak Djokovic y Diana Lorena Taurasi, la leyenda de la WNBA, hija de una argentina y que vivió en Rosario -justamente- durante la década del 90
McCarthy fue el arquero número 246 en ser víctima de Lionel Messi, mientras que Los Ángeles Galaxy el equipo 144°. Fue el primer gol de la Pulga en la nueva temporada de la MLS, que tendrá su próximo paso el sábado como local en el Chase Stadium para el clásico frente a Orlando.
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