El juicio comenzó este lunes en la Sala VII del Tribunal de Juicio con la lectura de la requisitoria fiscal en contra de la médica, Norma Beatríz Brandoni. La imputada declaró y negó los cargos de homicidio culposo por mala praxis.
Néstor Nieva, esposo de María Cristina Ulibarri contó que comenzó el juicio y remarcó las irregularidades que derivaron en el homicidio que ahora se debate en juicio oral y público. Afirma que la profesional médica tuvo una conducta negligente y siguió atendiendo después del hecho.
Nieva recordó que el caso sucedió el 13 de abril de 2018 cuando Ulibarri concurrió al Instituto Santa Agatha para realizarse la segunda sesión de punciones en menos de una semana. Ella realizaba un tratamiento de terapia para el dolor de su columna, ya que le inyectaban calmantes y anestésicos para evitar las dolencias.
Según cuenta el esposo de la víctima, la medica Norma Beatriz Brandoni, cometió el error de hacerla ir dos veces en una semana a la mujer para aplicarle las punciones en zona lumbar, cuando en realidad los profesionales recomiendan que la paciente descanse por lo menos siete días ya que es un tratamiento invasivo que amerita recuperación.
Al no haberse respetado este lapso, María Cristina Ulibarri, tuvo una hemorragia y entró en paro cardiorespirtatorio. Frente a esta situación, la medica Brandoni, se vio superada, no supo reanimarla para salvarle la vida y llamó al 911.
Finalmente, Nieva remarcó que las irregularidades están a la vista, primero que no se respetó el tiempo entre las punciones, además la médica no supo asistirla cuando entró en paro porque tampoco se hizo el procedimiento en un quirófano y mucho menos contrató a un anestesista.
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