La senadora nacional Nora Giménez dejó una lamentable imagen de nuestros representantes, “luchando” por el presupuesto de las universidades mientras admitía que no sabía lo que estaba votando cuando voto a favor de un aumento millonario de la dieta.
La marcha de las universidades públicas de este 23 de abril, en la que confluyeron personas de todas las edades y signos políticos en defensa de la educación pública y gratuita, a lo largo y ancho del país, se vio empañada con la presencia de personajes de la política que no hicieron más que ideologizar y manchar una postura nacional real y totalmente valiosa para confrontar las torpezas del Gobierno nacional.
Algunas de las figuritas que aparecieron en las calles este martes no resisten un archivo, como es el caso de Sergio Massa, quien propuso algunos años atrás arancelar las universidades, quien congeló el presupuesto de las mismas el año pasado sin ninguna explicación y que encima tuvo el tupé de admitir durante la marcha que “por suerte” recibió educación privada.
Peor aún, en el ámbito local apareció la senadora nacional por Salta, Nora Giménez, confesando haber votado a favor de un incremento salarial millonario de sui dieta, sin saber lo que votaba, y rasgándose las vestiduras por la necesidad de recursos para las casas de altos estudios que tanto dice defender.
Giménez le dijo a Profesional FM que el aumento en la dieta de los legisladores de la Cámara Alta nacional era totalmente “inoportuno, inconveniente e inapropiado”, sin embargo, no pensó lo mismo a la hora de levantar la mano. Aunque lo que más preocupa lo dijo segundos después, cuando admitió que los integrantes de las bancadas no estaban al tanto de lo que se votaba. Es decir, se enteró que su sueldo se iba a cerca de 7 millones de pesos, mientras votaba a favor. Raro.
Para no dejarla sola en este naufragio, vale mencionar que su par Juan Carlos Romero publicó en sus redes sociales su apoyo a la educación pública, y el tercero, Sergio Leavy, se llamó al silencio.
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