Es otro de los detalles que surgieron en medio del hermetismo. El acusado, José Figueroa, fue imputado y se abstuvo de declarar.
El femicidio de Mercedes Kvedaras, uno de los 16 que se investigan en la provincia, ocurrido el viernes pasado en una de las viviendas ubicadas en el barrio privado El Tipal, zona oeste de Salta capital, sigue estremeciendo a la sociedad salteña y a todo el país.
En medio de un hermetismo absoluto, ayer fuentes vinculadas al hecho le confiaron a El Tribuno otro dato del horror: el cuerpo de la víctima habría estado envuelto en una sábana atrás del vehículo, un Volkswagen Taos, donde ambos fueron encontrados cerca del mediodía. Lo que hace suponer que el abogado José Eduardo Figueroa habría intentado deshacerse del cadáver.
Luego de recibir el alta médica, el acusado de haber matado a su mujer en un country salteño fue trasladado ayer a la Alcaidía General de la Provincia, desde donde en horas de la mañana lo llevaron hasta el edificio del Ministerio Público Fiscal (MPF) para que la doctora Mónica Poma, titular de la Unidad Fiscal Especializada en Femicidios, le leyera la imputación en su contra: acusado de forma provisional por del delito de «homicidio doblemente calificado por el vínculo, la relación de pareja preexistente y por mediar violencia de género, en perjuicio de quien fuera su pareja».
Luego Figueroa fue consultado si quería declarar y se abstuvo de hacerlo. Llamó la atención, sobre todo en el universo de los profesionales del Derecho, que el letrado acusado por el femicidio de su pareja se haya presentado en el acto de imputación junto a un defensor oficial.
El crimen
Por estas horas y desde hace varios días son varias las hipótesis y las deliberaciones que los salteños hacen en torno al nuevo femicidio perpetrado en la provincia. Lo que aún no se conoce, al menos de manera oficial, es si el asesinato se produjo en horas de la mañana del mismo viernes o antes, durante la madrugada.
El móvil tampoco está claro, desde un primer momento se habló de una crisis matrimonial y eventual separación, sin embargo hay detalles más finos que conducen a plantear dos posibles hipótesis: la reacción del ahora acusado de femicidio pudo haber tenido que ver con un acto de violencia espontánea, por el contrario, premeditó lo ocurrido para asegurarse de acabar con la vida de su mujer.
El viernes del horror en El Tipal, en horas de la mañana al parecer José Figueroa fue observado por vecinos «desalineado» en su aspecto, algo que llamó la atención.
Ambos, víctima y victimario, fueron hallados dentro de un vehículo, ella envuelta en una sábana en la parte de atrás y él sentado en la parte del conductor. Mercedes estaba sin vida, había recibido un golpe contundente en la cabeza -sería en el rostro- y luego fue estrangulada. Él, en su intento de quitarse la vida, se cortó el cuello y ambos brazos, en la zona de la muñeca.
Alojado en el penal de Villa Las Rosas
Después de ser imputado y acusado con el agravante del femicidio, que contempla la pena máxima, José Eduardo Figueroa, de 42 años, fue trasladado a la Unidad Carcelaria número 1, la cárcel de Villa Las Rosas, en el área del hospital penal. Se trata de un sector de salud tranquilo donde el presunto femicida pasará sus horas sin inconvenientes y hasta nuevo aviso.
Tras recibir el alta médica en el hospital San Bernardo de la capital salteña, donde ingresó el viernes en código rojo, Figueroa fue trasladado primero a la Alcaidía General de Salta, zona norte de la ciudad, desde donde lo llevaron esposado al edificio del Ministerio Publico Fiscal, donde la investigadora Poma lo imputó por «homicidio doblemente calificado por el vínculo, la relación de pareja preexistente y por mediar violencia de género» en perjuicio de su pareja, Mercedes Kvedaras.
En materia investigativa la fiscal continúa con las acciones tendientes a recolectar pruebas que conduzcan al esclarecimiento de lo ocurrido la mañana del viernes último en El Tipal, un barrio privado de la capital salteña. Se trata de un hecho que conmocionó a los salteños y trascendió a nivel nacional, medios de todo el país se hicieron y siguen haciendo eco del horror perpetrado en una de las casas del country.
El último parte médico del letrado
El jefe del Servicio de Cirugía General del hospital San Bernardo, Simón Bligart, detalló ayer que el viernes Figueroa ingresó en código rojo, con «heridas presuntamente graves en el cuello y sus miembros».
«Fue trasladado directamente a quirófano, donde se logró controlar las heridas y estabilizarlo», explicó el profesional, quien señaló que una vez transcurrido su posoperatorio y de ser evaluado por el Servicio de Salud Mental y el de Cirugía, se decidió su externación para continuar con controles ambulatorios.
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