El tipo de cambio paralelo avanzó $8, pero los financieros retrocedieron; subieron las acciones argentinas hasta 9%, en las últimas dos ruedas el blue acumuló una suba de $14.
Luego de que el Gobierno anunciara la implementación del nuevo ‘dólar soja’, con un tipo de cambio diferencial de $200 para las exportaciones de la oleaginosa durante septiembre, el dólar blue se hundió $15 el lunes. Sin embargo, la tendencia no logró sostenerse a lo largo de la semana: hoy el billete estadounidense tuvo su segunda rueda consecutiva en alza y ya revirtió la caída previa.
Este miércoles el tipo de cambio paralelo se vendió en las cuevas porteñas a $284, $8 más arriba que el cierre previo (+2,9%). Ayer el dólar blue había rebotado $6, por lo que en las últimas dos ruedas acumuló una suba de $14.
“En el mercado descuentan que se venderán cerca de US$5000 millones en soja y que esto engrosará las reservas. Lo que no están contando es que por, cada dólar que ingresa, deben emitir pesos para pagarle al productor y, lo más probable, es que esos pesos vayan a comprar dólares alternativos al mercado. El dólar tendría que tener un precio objetivo de $300 aproximadamente, para un escenario económico local e internacional tan inestable”, consideró el analista financiero Salvador di Stefano.
En las primeras 72 horas desde que entró en vigencia la medida, se liquidaron US$1075 millones, cifra que incluso superó las estimaciones iniciales que realizó el ministro de Economía, Sergio Massa. Eso permitió que el Banco Central sume US$440 de reservas en las últimas dos ruedas. Además, este martes se anunció que el BID enviará a la Argentina un préstamo por US$1200 millones de “libre disponibilidad” para fortalecer los números de la entidad monetaria.
“Tanto el dólar soja como el flujo de financiamiento de bancos multilaterales resultan claves para fortalecer las reservas de cara al cumplimiento de las metas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y para evitar nuevos ‘ajustes’ al cepo importador”, señalaron desde Delphos Investment.
Aún así, los tipos de cambio financieros bajaron. El dólar MEP cotizó en los $271,33, un peso menos que la jornada previa (-0,4%); mientras que el contado con liquidación (CCL) apareció en pantallas a $280,82, una caída de $2,50 (-0,9%).
El dólar oficial mayorista se vendió a $140,80, es decir, 24 centavos más que ayer (+0,2%). Al contrastar con el dólar blue, la brecha entre ambas cotizaciones fue del 98%. En julio, este indicador llegó a posicionarse arriba del 160%, cifra históricamente alta.
“Los operadores están recibiendo con expectativas positivas las señales de aceleración en el ritmo de crawling-peg, y la nueva ronda de suba de tasas que estaría próxima, ya que, junto a la mayor oferta de divisas, podría contribuir a ir recuperando reservas y generar un mayor apetito -al menos de corto plazo- hacia el carry-trade. De ahí la retracción que vinieron experimentando los dólares financieros, más allá de los mayores vaivenes que podrían enfrentar a medida que se acercan al dólar solidario ($256), toda vez que los operadores se inclinan por apostar a que dicho nivel actuaría como límite inferior”, pronosticó Gustavo Ber, titular de Estudio Ber.
En línea con el buen clima que reinó a nivel global, hoy el S&P Merval subió un 2,7%, hasta las 141.001 unidades. El panel de la Bolsa porteña fue liderado por Transportadora de Gas del Norte (+7,7%), YPF (+7,6%), Transener (+6,8%) y Central Puerto (+6,7%).
En Nueva York, la tendencia para las acciones argentinas que allí cotizan (ADR) fue similar, ya que transitaron la jornada en terreno positivo. Los papeles de YPF avanzaron un 9,5%, seguidos por los de Transportadora de Gas del Sur (+7,9%), Central Puerto (+7,3%), el Banco Macro (+6,8%) y BBVA (+6,5%).
Por último, el riesgo país cedió cinco unidades y cerró el día en los 2360 puntos básicos (-0,3%). Los bonos del último canje de deuda operaron con tendencia mixta: en el exterior avanzaron hasta 0,6% (Bonar 2030; Global 2035 y 2046), pero otros activos se hundieron un 1,7% (Global 2030).
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