Alejandro Martorell explicó que son “perfectas” y, en algún momento, los corchos no alcanzarán para la cantidad de vinos que se producen en el mundo
El presidente de la Asociación de Bodegas de Salta, Alejandro Martorell, dialogó con Profesional y dijo que los corchos son importados, por lo que en algún momento hubo serias dificultades para conseguirlos. Sin embargo, la situación se normalizó.
Martorell expresó que es un elemento “caro” que puede costar entre uno y dos dólares según el corcho que se elija, pero advirtió que la tecnología “llegó para quedarse” y por eso hay vinos que se venden con tapa a rosca, que tiene algunas ventajas respecto al corcho.
“El corcho se produce en Portugal, en algún momento no van a alcanzar para la cantidad de vinos que se producen en el mundo”, agregó.
El empresario sostuvo que hay una “cuestión cultural” que hace creer que para tomar un vino tenes que sacar un corcho, y si tiene tapa a rosca es de menor calidad, pero lo desmintió y advirtió que existen vinos “muy buenos” con este método que es “perfecto” porque funciona bien y permite guardarlo y conservarlo mejor tras abrirlo.
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