Sergio tiene 88 años y es oriundo de Las Lajitas. Desde hace más de dos meses se trasladó a la capital salteña para tener un control más intensivo de su salud ya que es un paciente con insuficiencia cardíaca. Pese a esto, la burocracia y desatención del PAMI no hacen más que darle dolor de cabeza tanto a Sergio, como a su familia, que pena de oficina en oficina buscando respuestas.
Su hija, María Rosa, cansada de la situación de desidia que sostiene la obra social, denunció públicamente y legalmente a PAMI. A través de Multivisión Federal, la mujer reclamó que no logran que su padre acceda a hacerse un Holter, un estudio que no es de alta complejidad y que sirve para monitorear el ritmo cardíaco.
“PAMI no responde por la salud de mi papá. Hay muchas historias de gente que pasa meses sin conseguir turnos hasta para prácticas pequeñas”
En su denuncia, María Rosa relata que en sus horas de espera en las oficinas de la obra social, vio gente “hasta ponerse de rodillas frente a la abogada de PAMI pidiendo soluciones”. También indicó que su directora, la Dra. Verónica Molina, la atendió personalmente pero que “todo lo que dicen es falso”.
Entre los argumentos que esgrimen desde PAMI, indican que no hay especialistas que puedan brindar los servicios de salud que necesita Sergio. “Nos dijeron que hicieron un barrido de médicos, que están poniendo nuevos profesionales, que están armando un nuevo padrón, pero soluciones no hay”, marcó la mujer.
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