Operaba por vía aéreaDeclaración indagatoria en Salta del capo narco Jorge Granier Ruiz

La indagatoria se realizó a través de Zoom desde el Juzgado Federal 1 de Salta capital y la Alcaidía Federal de Buenos Aires donde se encuentra detenido el capo narco desde el domingo 12 del corriente mes, cuando fue extraditado desde Brasil, donde a fines de marzo fue detenido, hacia este país.

En la audiencia de imputación participaron los fiscales federales especializados en narcotráfico de la Procunar NOA, los doctores Matías Álvarez y Jorge Viltes Monier.

Sobre Granier Ruiz pesaba una orden de captura internacional solicitada por el juez Bavio, tras lo cual fue interceptado en abril pasado en el centro del estado brasileño de Mato Grosso do Sul. En el momento de su detención, en un control policial de rutina, el sospechoso presentó primero una identificación falsa, al cabo de algunos minutos decidió dar su verdadera identidad y fue detenido inmediatamente.

El ciudadano boliviano, a quien apodan «El Fantasma», está sospechado de haber trabajado con varios de los líderes narcos más importantes de Argentina. En Salta por ejemplo se lo vincula con Adelaida Castillo y el clan Loza, mientras que en Rosario de Santa Fe habría trabajado para el capo narco Esteban Lindor Alvarado. En esta última ciudad los lazos serían con la conocida banda de Los Monos.

El Fantasma Ruiz está sospechado de haber organizado el transporte y la entrega de 389 kilos de cocaína que fueron secuestrados el 24 de septiembre del 2020 en la provincia de Buenos Aires. Según las fuentes, el millonario cargamento fue trasladado por la norteña Adelaida Castillo, quien fue detenida en esa oportunidad cerca de Santa Fe.

Este grupo narcocriminal habría concretado el envío de estupefacientes el 24 de septiembre de 2020, sobre la ruta nacional 9, a la altura del kilómetro 198, Paraje Paraíso, en la provincia de Buenos Aires, consistente en 389,320 kilos de cocaína.

Comisiones y vínculos

Jorge Adalid Granier Ruiz es investigado por encabezar una organización dedicada al tráfico ilícito de sustancias estupefacientes, especialmente a su transporte y distribución desde Bolivia y Paraguay hacia Argentina.

Las fuentes indicaron que la organización narco cobraría una comisión en dólares por el ingreso de la sustancia al país, El Fantasma estaría a cargo de la logística: acopio, entrega y cobro del servicio. Para esto último, según fuentes investigativas, necesitaría la ayuda de Gustavo Pelozo, actualmente detenido, quien estaba a cargo de brindar el lugar donde retirar la droga, además de impartir directivas a otro detenido, Ignacio Quintana.

En ese sentido el imputado boliviano se valía de la intervención de Pelozo y éste de Quintana para la organización logística con vehículos, predio para el aterrizaje, conocimiento del área geográfica (caminos secundarios, campos con poco uso) para asegurar la recepción de la droga y que esta llegue a sus respectivos compradores o dueños, Adelaida Castillo era una de ellas.

Jerga narco

Los involucrados en la entrega de los 389 kilos de cocaína, en septiembre del 2020, se referían a la sustancia como «la chica», cargamento que era transportado en avionetas desde Paraguay, su origen sería peruano.

Las fuentes señalaron que Granier Ruiz recibía sumas millonarias en dólares, y uno de los centros de acopio estaba ubicado en Rosario de Santa Fe, ciudad a la que los narcos denominaban «Rosa», «tía Rosa» o «Rosalía».

A raíz de las escuchas telefónicas e impactos de las antenas, en el tramo final de las pesquisas los sabuesos comprobaron que Pelozo y Quintana frecuentaban predios rurales ubicados en Santa Fe y Córdoba. En esta última provincia existe una pista clandestina de aterrizaje y un remolque de los utilizados para almacenar combustible ubicado cerca de esa pista.

Antecedentes, según oficina de la DEA

Los investigadores tendrían comprobado que la DEA, oficina para el control de las drogas de Estados Unidos, informó que Granier Ruiz estuvo involucrado en 2006 en el envío de 925 kilos de cocaína líquida desde Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) hacia Madrid (España) y durante el año 2013 fue identificado como el proveedor de cocaína de Esteban Lindor Alvarado, quien resultó ser el responsable de una organización de tráfico de drogas en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe.