Proteccionistas están molestos porque el espectáculo habría empleado animales en la obra, como así fuegos artificiales de fuerte detonación. Desde la dirección se defendieron e invitaron a charlar su disconformidad. Ayer hubo una manifestación en contra del show.
Un conflicto inesperado surgió en las últimas horas, a causa de una denuncia por parte de proteccionistas contra el espectáculo de Ciudad de Navidad, dado que este habría usado animales en sus escenas, como así empleado fuegos artificiales de fuerte detonación, según informó Informatesalta.
Lucas Iñigo, uno de los proteccionistas, aclaró las razones del malestar que presentan, luego que le llegaran videos del espectáculo en los que se veían “fuegos de artificio de gran magnitud”, manifestó en diálogo con Somos Salta.
“El director (de la obra) había anunciado que, para darle una innovación, había contratado productores para dar un espectáculo diferente y usar fuegos artificiales sin estruendo”, se mostró sorprendido Iñigo ante las falencias que habrían tenido lugar.
Según tenían conocimiento, durante la puesta en escena de Ciudad de Navidad habrían usado ovejas y caballos en la representación. “Están violando una ley provincial vigente desde 2013, así que haremos la denuncia correspondiente”, adelantó el proteccionista.
Respuesta oficial
En la noche del jueves, defensores de los animales, integrantes de asociaciones proteccionistas y vecinos de la zona realizaron una protesta para dejar en claro su disconformidad tras lo ocurrido. En medio de esa manifestación, el director del espectáculo, Lucas Torres, se defendió.
“Nunca recibí ninguna propuesta de nadie para venir a dialogar, si es por el tema de la pirotecnia hay muchas ideas para hacer, pero estaría buenos que vengan a hablar”, pidió Torres. Sobre los animales, aclaró que solo cuentan con dos caballos que fueron prestados por Caballería de la Policía, para una sola escena.
También recalcó que no usan ovejas, sino que “solo tenemos dos caballos, que nos da la Caballería de la policía” que usan para una única escena, al igual que se encuentran en buena forma. Siguiendo una tradición de 53 años, Torres vio difícil “cambiar todo a último momento”, pensando en el trabajo arduo que realizan para montar la obra. “No es barato, es un show caro”, puntualizó, no sin antes volver a invitar a aquellas personas disconformes a conversar.
Agregue un Comentario