El hecho salió a la luz cuando la niña de 4 años, tras orinarse en los pantalones en dos ocasiones, confesó a su tía que su padre le había tocado y lastimado en su zona íntima.
El 12 de septiembre pasado, la madre de la niña se enteró de lo sucedido y la llevó al Hospital Materno Infantil, donde se constataron lesiones compatibles con el abuso. Fue ese día que radicó denuncia en contra del hombre, con quien ya no convivía.
Desde el 9 al 11 de septiembre, la niña se había quedado en la casa de su padre en barrio María Ester, con quien mantenía un régimen de comunicación libre de acuerdo a lo pactado al momento de la separación de ambos progenitores. Además la menor contó que su papá le dijo que no le cuente nada a su mamá.
El hombre de 24 años fue condenado en un juicio abreviado a tres años de prisión de ejecución condicional por abuso sexual simple agravado por el vínculo y la guarda. La condena incluye una serie de reglas de conducta que deberá cumplir durante 3 años. Entre ellas, se destacan la prohibición de acercamiento y contacto con la niña y su familia y la realización de un tratamiento psicológico para el control de sus impulsos sexuales y con perspectiva de género.
También se vio privado de la responsabilidad parental con respecto a la niña. La sentencia fue dictada por la jueza de Garantías 8 Claudia Puertas en una audiencia flexible y multipropósito.
Fuente: Poder Judicial de Salta
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