Política

Blindaje oficialistaCon el apoyo clave de cinco radicales, Milei consiguió que Diputados deje firme el veto a la reforma jubilatoria

Diputados Miguel Angel Pichetto Foto Federico Lopez Claro

La oposición no llego a los dos tercios necesarios para revertir la decisión del Presidente: quedó a 13 votos. El oficialismo fue acompañado por el PRO y por los radicales que se fotografiaron con Milei en la Casa Rosada.

Con votos radicales y del PRO, el oficialismo blindó en Diputados el veto de Javier Milei a la ley de reforma de movilidad jubilatoria. La oposición no pudo reunir los dos tercios para imponer el proyecto aprobado en junio pasado que otorgaba un aumento adicional de 8 % a las jubilaciones, una actualización anual y sobre todo llevaba al Estado nacional a hacerse cargo de las deudas con las cajas previsionales que quedaron en manos de las provincias.

El kirchnerismo, Encuentro Federal y un sector mayoritario de la UCR conformaron los 153 votos a favor de la insistencia de la ley, pero no le alcanzó para llegar a los dos tercios, que con 248 legisladores presentes había quedado establecido en 166 voluntades.

Al oficialismo le alcanzó con sus habituales aliados, el PRO y espacios libertarios llegaron a los 87 votos, por lo que sobraron cuatro representantes. Las abstenciones fueron de parte de Innovación Federal y la mendocina Lourdes Arrieta, que en un principio había anunciado que iba por el rechazo al veto.

El larretista Alvaro González votó a favor de la insistencia mientras que estuvieron ausentes Héctor Baldassi, Ana Clara Romero (Chubut) y Héctor Stefani (Tierra del Fuego).

La sesión comenzó con la presencia de 131 diputados en medio de un clima enrarecido tanto en el recinto de la Cámara baja como en la entrada al Congreso, donde se dispuso un fuerte cordón policial con motivo de la marcha convocada para rechazar la decisión del Gobierno.

En el arranque se aceptó la renuncia del radical entrerriano Pedro Galimberti, que renunció a su banca tras ser nombrado por el gobernador Rogelio Frigerio como Delegado de la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande. En su lugar juró Nancy Ballejos, del PRO, quien le dará un voto más al oficialismo.

Tras la asunción de la nueva diputada, el legislador de la izquierda Nicolás del Caño advirtió que «es un escándalo lo que está pasando» en la Cámara al habilitar la jura de Ballejos. «Esto altera el resultado de la sesión, son lo peor de la casta», protestó el legislador.

La interna radical llegó al recinto de Diputados

El debate se calentó cuando se coló la interna radical. Fue Roxana Reyes quien encendió el fuego cuando luego de relacionar la crisis del sistema previsional con la decisión del kirchnerismo de incorporar nuevos jubilados mando un mensaje al interior de su bloque para justificar su abstención.

«Van a tener que ir a terapia muchachos, ganó Javier Milei, no ganamos nosotros», disparó la santacruceña, quien señaló que «el veto presidencial dice que no hay posibilidad de donde sacar la plata, van a emitir, van a crear otro impuesto».

Acto seguido, Pablo Juliano, el diputado que responde a Facundo Manes, salió al cruce de su compañera de bloque avisando que «va a votar igual y a reafirmar su voto a favor del proyecto». Y cargó contra los diputados que se fotografiaron con Milei al exigir que «devuelvan sus bancas». «Tengan el coraje político de lo que hacen afuera sostenerlo acá adentro», dijo el diputado, quien advirtió que «las abstenciones y los que den vuelta su voto van a tener que dar explicaciones».

Danya Tavela, una de las diputadas de Evolución que está alineada con Martín Lousteau, también cuestionó a los correligionarios que se dieron vuelta. «Roma no paga traidores y el pueblo tampoco los vota», avisó la legisladora en el recinto.

La tensión estuvo centrada en los votos del tucumano Mariano Campero, el correntino Federico Tournier, el cordobés Luis Picat, el neuquino Pablo Cervi y el misionero Martín Arjol, quienes el lunes estuvieron reunidos con el presidente Javier Milei para dar su apoyo al Gobierno. A excepción de Tournier, que en junio -cuando se votó la media sanción- todavía no era diputado, los otros cuatro habían votado a favor del proyecto vetado.

Sólo uno de los cinco radicales que cambió su voto para acompañar el veto de Milei, cruzó al kirchnerismo. El correntino Mariano Campero, reprochó que «Cristina Kirchner vetó el 82% y ninguno de Unión por la Patria hace referencia a eso». Y por los cuestionamientos de supuestos sobornos para cambiar su voto, apuntó: «Los acostumbrados a los bolsos de López se creen que todos somos iguales».

Tras la sesión, un grupo de diputados que responden a Manes y Lousteau presentaron una nota pidiendo al jefe de la bancada, Rodigo de Loredo, «un replanteo y un reordenamiento» del bloque, «dejando que quienes han elegido otro camino lo transiten, y reafirmando los valores de identidad» de ese espacio político.

Fuerte pelea entre los K y los aliados en el recinto

El kirchnerismo estuvo casi completo y aportó 98 votos de los 153 votos. Faltó la sanjuanina Ana Aubone. Agustina Propato, la esposa de Sergio Berni, llegó en una silla de ruedas por una lesión en una pierna.

En el debate, el jefe del bloque K, Germán Martínez, apuntó contra la Casa Rosada por vetar la ley aprobada por el Congreso con los dos tercios de ambas cámaras. «Un gobierno colgado del travesaño, se lleva a diputados que en junio votaron a favor de los jubilados», protestó el santafesino, para agregar que «el diablo disfrazado de fuerza del cielo metió la cola».

Por su parte, Cristian Ritondo, jefe del PRO, defendió en el recinto el veto del Presidente, al apuntar contra la política previsional del kirchnerismo que a su entender «ha sido inviable». «No vamos a ser parte de un simple montado que empobreció a los argentinos». «Si quieren voten, pero acá hay responsables de que los jubilados hayan perdido 40 % del poder adquisitivo porque Milei hace seis meses que está gobernando», agregó.

Centrales sindicales movimientos sociales y organismos derechos humanos participan en la protesta convocada por las organizaciones de jubilados. FOTO: Francisco Loureiro.Centrales sindicales movimientos sociales y organismos derechos humanos participan en la protesta convocada por las organizaciones de jubilados. FOTO: Francisco Loureiro.

En la entrada al Congreso, sobre la avenida Rivadavia, se vivieron momentos de tensión. Sobre todo cuando ingresó la libertaria Lilia Lemoine a quién le gritaron «payasa», «traidora» y «vende patria», entre otros términos. También hubo insultos para José Luis Espert, presidente de la comisión de Presupuesto.

Cuando se trató el proyecto en la madrugada del 5 de junio, los 8 diputados de Innovación votaron en forma positiva avalando el aumento a los jubilados. Este cambio de los federales deja al oficialismo más cerca de validar la decisión del Presidente.

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