El cuervo sufrió su segunda caída consecutiva en el torneo Federal A, 2 a 0 ante el ordenado y prolijo Defensores de Pronunciamiento.
Central Norte, urgido, buscaba su primer triunfo de la temporada en condición de local, pero cayó por un doblete de Mauro Siergiejuk.
Fabricio Reyes encontró el descuento en el final, cuando ya era tarde. Segunda derrota consecutiva para el cuervo, que tendrá que replantearse mucho.
Una derrota que duele, y mucho. Porque no estaba en los planes perder en casa contra un rival modesto y que con poco, con orden y una pizca de contundencia, complicó más de la cuenta a un equipo perdido, que en ningún momento encontró la brújula, el juego y el orden, y que pagó y sufrió más de la cuenta por sus errores. Y fundamentalmente su entrenador, Ezequiel Medrán, perdió el partido con los cambios ya en la semana (sobre todo el ingreso de un errático Sebastián D’ Angelo por Mauricio Pegini) y porque demoró más de la cuenta para realizar las modificaciones necesarias durante el partido y cuando todo se hacía cuesta arriba.
De entrada nomás, Central se topó con un rival que se paró bien atrás, con un hermético 4-4-1-1 que le propuso un cerrojo que no dejó jugar ni hilvanar a los hombres más criteriosos del equipo local, forzándolo mucho al pelotazo intrascendente y a la búsqueda previsible y monótona. Y así se hacía muy difícil.
Lo más interesante del conjunto azabache, sobre todo en el primer tiempo, fue la injerencia de Carlos Arriola por izquierda, siendo el hombre que más buscó. Por el contrario, es el ala derecha aún el déficit mayúsculo del cuervo en el mediocampo. Muy flojo lo de Rivas, que no se encontró nunca con Piergiacomi, el otro punto flaco del equipo.
Las opciones de peligro en esa primera mitad llegaron en cuentagotas, porque a Central le costó muchísimo generar y se hizo dócil ante el planteo ordenado y de contención que le propuso el cuadro entrerriano.
Pero en el complemento, la visita, que ya parecía tener controlada cada situación ofensiva del local, se animó y se encontró al minuto nomás con el primer gol, que enmudeció a los asistentes al Martearena: centro de Allende, Siergiejuk entró solo y la mandó a la red, ante el titubeo del “uno”, que tenía su debut oficial.
Al cuervo le costó mucho asimilar el golpe y se desarmó. Young se vio muy solo en el mediocampo, Rivas no se encontró nunca, y esto sumado al bajón de Arriola, que había entrado bien en el partido, confabularon al desconcierto colectivo de Central.
A los ponchazos y como pudo, el cuervo salió a buscar el empate sin claridad.
Para colmo de males, a los 23’ llegó el golpe de nocaut para Central, tras una muy mala salida de D’Angelo, otra vez apareció Siergiejuk para capitalizar las dudas del arquero y el descalabro de la defensa y marcar el 2 a 0 que parecía lapidario.
Los de Barrio Norte se desdibujaron aún más tras el segundo cachetazo y los intentos eran vanos y estériles, aún con tres puntas en cancha tras la entrada de Reyes por Figueroa, variante ofensiva que llegó demasiado tarde para la demanda de Central en el partido.
El gol de la Perla llegó en el tercer minuto de adición, pero ya no había tiempo para ilusionarse con algo más.
Fuente: El Tribuno
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