El pivote de Houston Rockets ayudó a que todo un estadio coma gratis.
La NBA en su última jornada de la temporada regular ofreció todo tipo emociones, ya que la definición por ingresar a los playoffs está más caliente que nunca. Sin embargo, sucedió algo en Los Angeles que acaparó la atención de los fanáticos, no porque lo que había en juego entre los Clippers y Houston Rockets, sino porque uno de los protagonistas fue el responsable de que todo un estadio pudiese comer gratis.
Con Los Ángeles Clippers ya clasificado a los playoffs en el cuarto lugar de la Conferencia de Oeste y con los Rockets eliminado de la postemporada, poco atractivo había en este partido que sirvió para completar los 82 juegos de cada franquicia. Sin embargo, los fanáticos en el Crypto.com Arena, la casa que los Clippers comparten con los Lakers, estallaron cuando uno de los jugadores más divertidos de la liga falló, a propósito, un tiro libre.
Apenas faltaban poco más de cuatro minutos para el final del partido cuando fue a la línea de tiros libres el gigante serbio Boban Marjanovic. El pivote de los Rockets, de 2.24 metros, no acertó su primer lanzamiento y tras esa acción comenzó a escuchar a los fanáticos que le pedían no convierta el segundo.
¿Por qué le pidieron a Marjanovic que falle? Es que la franquicia de Los Ángeles en su estadio tiene una promoción especial para aquellos que asisten los días de partido como local: si un jugador del conjunto rival falla dos tiros libres seguidos, cada uno de los aficionados recibe pollo frito de parte de la organización.
Rápidamente las cámaras se enfocaron en el gigante serbio, que al escuchar al público pedir por “comida gratis”, accedió a la solicitud y se señaló frente a los fanáticos en señal de que iba a hacer lo que le pedían… Tras fallar el segundo libre, el serbio levantó su brazo derecho con el dedo índice marcando que había cumplido con su cometido. “El hombre del pueblo”, fue la forma que utilizó la liga en sus redes sociales para viralizar la acción.
El pivot de 35 años, que nació en la ex Yugoslavia y lleva ocho temporadas en la NBA, es un buen lanzador desde la línea de tiros libres. En esta campaña lleva más de un 76 por ciento de efectividad, y en este encuentro anotó 13 puntos y 8 rebotes en 12 minutos de acción. Más allá de este gesto, Marjanovic es conocido por ser una persona muy amable y divertida: “Boban es un niño grande”, declaró Dan Craig, entrenador asistente de los Rockets.
“¡Les dio pollo! ¡Es un hombre del pueblo!” gritó uno de los comentaristas de la transmisión Space City Home Network, uno de las señales de TV de los Rockets. Los fanáticos de los Clippers corearon el nombre de Marjanovic, uno pivote conocido en Los Angeles, ya que jugó allí en la temporada 2018 y 2019.
En cuanto al partido, Cam Whitmore anotó 21 puntos y los Rockets vencieron por 116-105 a los Clippers, que se encaminan a los playoffs, para evitar por cuarto año seguido una campaña con marca perdedora. El novato Amen Thompson tuvo un triple-doble de 18 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias, el máximo de su carrera, para Houston, que quedaron al margen de los playoffs con marca de 41-41, tras perder seis de sus últimos nueve partidos.
Los Clippers, campeones de la División Pacífico y cuartos preclasificados, se enfrentarán a Luka Doncic y los Dallas Mavericks en la primera ronda el próximo fin de semana. Terance Mann anotó 24 puntos y Amir Coffey agregó 18 para los angelinos en su último partido de temporada regular. La superestrella de los Clippers, Kawhi Leonard, se perdió su octavo partido consecutivo debido a una inflamación en la rodilla derecha.
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