La vicepresidente insiste con sus opiniones entre futbolísticas y patrióticas en redes
Las opiniones futbolísticas de Victoria Villarruel vienen impactando en el Gobierno como una cuestión de Estado. Al sainete de su defensa a Enzo Fernández por los cantos xenófobos, que llevaron a la vicepresidente a cuestionar a Francia por «colonialista» y a Karina Milei a pedir disculpas por ella, este miércoles se le sumó una arenga, siempre de corte patriótico.
«Aunque nos insulten y silben nuestro Himno, Argentina está destinada a la grandeza», posteó Villarruel en su cuenta de X ante el bochorno que resultó la derrota de la Selección en el debut de los Juegos Olímpicos, con proyectiles y bombas de estruendo cayendo sobre los jugadores y con el corte del video del momento. No dijo a quiénes se refería. El primer destinatario de sus críticas puede ser Marruecos y su hinchada que protagonizó el papelón. El segundo, Francia, el anfitrión del evento deportivo.
«Viva la Argentinidad», reivindicó, mayúscula, la vicepresidente que hace su juego propio mientras trasciende que no hay diálogo con Javier Milei desde que reflotó la interna. El Presidente, que se prepara para volar a París, invitado a la inauguración de los JJOO por el propio Emmanuel Macron, viene de tildar de «no feliz» el tuit anterior de su compañera de fórmula con destino francés.
Fue aquel en el que Villarruel, en una particular reivindicación histórica de próceres argentinos morenos había lanzado: «»Ningún país colonialista nos va a amedrentar por una canción de cancha ni por decir las verdades que no se quieren admitir. Basta de simular indignación, hipócritas».
La frase llevó a la secretaria general de la Presidencia rauda a la Embajada francesa, preocupada también por su propio destino, ajeno a la invitación que su hermano recibió al evento deportivo que no llegaba con asiento para ella.
Una gestión de disculpas diplomática sin intervención de la canciller Diana Mondino.
Aunque nos insulten y silben nuestro Himno, Argentina está destinada a la grandeza. ¡Viva la Argentinidad! 🇦🇷 pic.twitter.com/RTy9h066Q9
— Victoria Villarruel (@VickyVillarruel) July 24, 2024
Mientras los Milei le bajaban la pirotecnia a la verba de fútbol y patria de Villarruel, la vice resaltó su agenda propia.
Mostró federalismo, ponchos y las manos sobre el «burrito Vicente» desde Catamarca, hizo presencia en la Rural, con mollejas, senadores y la patria ganadera. Y volvió a la pasión de multitudes: el fútbol, con mirada nacionalista y geopolítica.
Enamorada de la Argentina. Recorrer sus pueblos, hablar con la gente, conocer nuestras tradiciones, abrazar compatriotas y difundir las actividades productivas, el turismo y el trabajo silencioso de muchos argentinos. Escuchar las penurias, compartir las dificultades, ¡gracias… pic.twitter.com/w7lEkBBylF
— Victoria Villarruel (@VickyVillarruel) July 22, 2024
Milei viene de forzar la salida de un funcionario por osar sugerir que Lionel Messi pudiera pedir disculpas por los cantos racistas que surgieron de teléfonos seleccionados.
En las redes libertarias se pidió esa expulsión para Julio Garro, exsecretario de Deportes, y se bregó por un funcionariado oficialista sin librepensadores.
En todo ese tiempo, con gestiones en la Embajada de Francia y todo, Villarruel sostuvo anclado como tuit principal de sus redes, aquel que dejó ver a pleno la interna.
Argentina es un país soberano y libre. Nunca tuvimos colonias ni ciudadanos de segunda. Nunca le impusimos a nadie nuestra forma de vida. Pero tampoco vamos a tolerar que lo hagan con nosotros. Argentina se hizo con el sudor y el coraje de los indios, los europeos, los criollos y… pic.twitter.com/Wkevi8TrVO
— Victoria Villarruel (@VickyVillarruel) July 17, 2024
«Paso por alto y no me ofendo», sostuvo la vicepresidente, en su gira federal por Catamarca, cuando le recordaron las críticas a sus posteos de Milei. «Yo siempre defender a la Selección Argentina y a los argentinos», agregó este martes. Y este miércoles volvió a la carga.
Mientras Milei visite Francia, Villarruel, mera cuestión de formas, quedará a cargo de la Argentina.
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