No cumplen con los requisitos mínimos de alojamiento y la sobrepoblación va del 148 al 700% en cárceles y alcaidías de la Provincia, según el Comité de Prevención de la Tortura.
El Comité Provincial para la Prevención de la Tortura elaboró un informe sobre las cárceles y las condiciones en las que viven los internos de las distintas unidades de detención. En diálogo con Profesional, uno de sus miembros, Andrés Giordamachi, relató cuál es la realidad de los presos salteños.
Según destacó, los presos deben contar con servicios penitenciarios mínimos que no los lleven a sufrir maltratos físicos ni psicológicos, según lo establecen los tratados internacionales y el protocolo de actuación del Comité Nacional contra la Tortura.
Al respecto, indicó que los números en Salta son alarmantes. Explicó que las cárceles cuentan la cantidad de plazas por la cantidad de camas, y bajo este contexto, informaron que la sobrepoblación registrada es del 38%.
Sin embargo, según el Comité este número asciende a 143% ya que no cumplen con características básicas como por ejemplo habitar espacios de seis metros cuadrados, con ventilación y servicios como alimentación y atención médica-psicológica.
Sostuvo que lo mismo sucede con la alcaidía de Tartagal, en donde la sobrepoblación supera el 700%. Allí las celdas son muy pequeñas y a pesar de que cuenten con un colchón para dormir, viven hacinados.
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