Más de 70 reclusos pertenecientes a una organización narcocriminal escaparon de una cárcel paraguaya y podrían huir hacia nuestro país.
La fuga masiva de presos de la cárcel de Pedro Juan Caballero, en el departamento paraguayo Amambay, puso en alerta al país vecino y al nuestro. Ante la peligrosidad de los reclusos pertenecientes de una organización narcocriminal se dispuso desde el Gobierno un refuerzo de seguridad en distintos sectores de la frontera con Bolivia y Paraguay.
Son 75 los reclusos prófugos, entre quienes se encuentran criminales que participaron en una masacre, en la que 10 presidiarios murieron decapitados en la misma cárcel de San Pedro, el 16 de junio del año pasado.
El escape se produjo la madrugada del domingo por un túnel construido por los reclusos, tras un soborno de 80.000 dólares. Según medios paraguayos, Las autoridades penitenciarias sabían desde hace semanas sobre el complot y aun así no pudieron frenarlo. El jefe del penal fue destituido y se arrestó a 28 guardias penitenciarios.
Ante la fuga y la posible ruta hacia nuestro país, el Ministerio de Seguridad de Salta puso en marcha el plan preventivo “Refuerzo de Frontera”. El objetivo es reforzar los controles de frontera, cuya cobertura de seguridad es de competencia nacional, según comunicaron desde la Provincia.
La Policía de Salta debe optimizar los recursos de la zona para la identificación de personas. También tiene que fortalecer el patrullaje virtual con las cámaras de seguridad en la frontera con Bolivia y Paraguay.
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