Momento de máxima preocupación se vive en la escuela Domingo Faustino Sarmiento. Hoy, 15 chicos tuvieron que ser asistidos por problemas de intoxicación, y cinco de ellos fueron trasladados al Hospital Materno Infantil. La escena incluía nuevamente ambulancias en la entrada y la preocupación e incertidumbre de los padres por la seguridad de sus hijos.
Fabián Ariel Arguello, titular del SAMEC, señaló que los niños presentaban síntomas de cefalea y aclaró que, hasta el momento, no habían adultos que presentaran sintomatología.
Este incidente ocurre a 11 días de que otros 11 niños fueran asistidos en el establecimiento por síntomas similares, como mareos y desmayos.
Recientemente, se conoció que la intoxicación de los alumnos fue causada por monóxido de carbono, según informó la Dirección de Epidemiología.
El doctor Francisco García Campos comunicó a los padres y autoridades que: «Las conclusiones indican que los niños tuvieron una exposición al monóxido de carbono. Se descartó la intoxicación alimentaria y se concluyó que la causa fue la exposición al monóxido».
El informe final, recibido el domingo a las 23:30, fue emitido por el médico tratante del Hospital Materno Infantil. «Desde el sector salud se propuso un acompañamiento de 30 a 40 días para todo el establecimiento, con el objetivo de trabajar con un plan conjunto», afirmó García Campos.
Además, especificó que Gasnor realizó una revisión técnica y no encontró pérdida de gas: «Sigue la incógnita sobre cuál pudo haber sido la posible fuente de exposición al monóxido de carbono», agregó. La ministra de Educación de la provincia, Cristina Fiore, también había destacado previamente que los niños podrían haberse intoxicado con monóxido de carbono.
Mientras tanto, persiste la preocupación ya que los motivos detrás de los incidentes aún no están claros.
Mientras sigue la preocupación, en las redes sociales se viraliza la imagen de un medidor de gases que fue usado en el establecimiento y alerta sobre gases en el establecimiento.
Se trata de un GX-2012 que está construido para medir los gases que OSHA requiere para la entrada en espacios confinados: oxígeno (O2), monóxido de carbono (CO), sulfuro de hidrógeno (H2S) y los niveles de explosivos más bajos de una gama de combustibles (LEL).
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