Un comandante que se negó a difundirlos fue presionado por un gremialista y tuvieron que cancelar un vuelo. La compañía anticipa que habrá sanciones.
Por los parlantes y en pleno vuelo, al menos una docena de pilotos de Aerolíneas Argentinas protestaron contra la política aerocomercial en relación al ingreso de las empresas «low cost» en el país. Pero este domingo uno de los comandantes se negó a hacerlo, y recibió presiones por parte de un gremialista, que afectaron su salud. En tanto, la compañía denunció a uno de los gremios de pilotos por emitir esos mensajes.
Voceros de Aerolíneas Argentinas confirmaron a Clarín que el hecho sucedió el domingo por la mañana. «El vuelo salía de Buenos Aires y cuando el piloto se presentó en la sala de embarque se encontró con un delegado de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) que lo intima a leer el panfleto. Se niega, y hay un cruce de palabras, con testigos», explicaron.
Según las fuentes de la empresa, durante el vuelo hacia Ushuaia el piloto se empezó a sentir mal. Entonces derivó el vuelo al copiloto y le pidió que se hiciera cargo. Una vez en la ciudad austral, el hombre fue a un centro médico y le detectaron que tenía alta presión. Actualmente está bien de salud.
Por este incidente, se suspendió el vuelo 1893 que debía despegar el domingo desde Ushuaia. Esto generó pérdidas económicas a la compañía y grandes complicaciones para los clientes, aseguró la empresa.
«Probablemente haya una denuncia penal, es una decisión de el piloto –contaron los voceros–. Va a haber una sanción para los pilotos que leyeron los mensajes. Tenemos identificados a unos 12 pilotos, son todos delegados, que apelan a su impunidad gremial para hacer esto».
Al respecto, la compañía presentó este lunes a la mañana una denuncia contra la APLA en el Ministerio de Trabajo, «solicitando la urgente intervención de las autoridades laborales».
«De acuerdo a lo advertido oportunamente, la empresa sancionará al personal que haya realizado actividades prohibidas por las normas de conducta y seguridad aérea», dijo Aerolíneas en un comunicado. «La compañía solicitó la inmediata intervención del Ministerio de Trabajo para que éste dictamine si los hechos denunciados representan un incumplimiento a la conciliación obligatoria dictada por dicha autoridad el 10 de julio del corriente», continuó.
La empresa se refiere al uso del sistema de audio para la emisión de un mensaje como algo «completamente inapropiado y que constituye un accionar ilícito laboral». Y agrega que todos los comentarios que la tripulación hace por los parlantes «están reglados por normas internas, y no pueden incluir opiniones personales, ni afectar la seguridad del vuelo».
De hecho, según comentaron los voceros de la empresa a Clarín, hubo personas que viajaban en los aviones que se preocuparon al escuchar este tipo de mensajes. «Se genera alarma, lo que afecta a los pasajeros y a la compañía», dijeron las fuentes oficiales.
«Resulta importante aclarar que Aerolíneas Argentinas no autorizó la utilización de ninguno de los medios de comunicación del avión para dichos fines, y que rechaza por completo el accionar sindical, el cual ha generado preocupación e intranquilidad en los pasajeros, afectando la normal operación de la compañía», concluye el comunicado.
El mensaje que se leyó en varios vuelos, primero en español y luego en inglés, dice lo siguiente: «Hoy vemos con preocupación que el Ministerio de Transporte de la Nación impulsa una política aerocomercial tendiente a que haya en el país una aviación cada vez más desregulada, con menos intervención de los organismos de control, modificando normativas para permitir menor entrenamiento de los pilotos, menores controles en mantenimiento, al mismo tiempo que permite una creciente extranjerización de los vuelos, afectando con ello nuestro trabajo».
Clarín intentó comunicarse en reiteradas ocasiones con las autoridades de APLA, sin obtener respuesta.
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