Uno era oriundo de Bermejo, en tanto el otro joven era de la ciudad de Tarija. La Justicia de Bolivia investiga la muerte de dos ciudadanos y busca determinar el móvil.
Los cuerpos fueron hallados abandonados al costado de la ruta nacional 34, en Colonia Santa Rosa, Salta. Las víctimas fueron identificadas por los familiares que llegaron hasta nuestro país el día domingo, ambos son del departamento Tarija, Bolivia, y eran compañeros de colegio, explicó el diario El Deber de Santra Cruz en su edición de ayer.
Los dos jóvenes fueron asesinados de varios disparos de armas de fuego y se sospecha plenamente que no fueron ejecutados a la orilla de la ruta 34, sino descartados en ese pastizal luego de un supuesto ajuste de cuentas. Los cuerpos fueron hallados a un costado de la ruta nacional 34, entre las localidades de Colonia Santa Rosa y Urundel, en el norte de la provincia.
Evidentemente, según una fuente, los cuerpos fueron abandonados para que los encontraran y eso lleva a la hipótesis que detrás de este doble crimen de ciudadanos extranjeros hay un claro mensaje mafioso.
Así fueron encontrados
El doble crimen de los bolivianos se produjo varias horas antes del hallazgo de los cuerpos, ocurrido en la tarde del pasado viernes 10 de mayo.
Dos días después los restos fueron identificados. Se conoció que las dos víctimas eran de Tarija y fueron identificados como Wildon Zurata Morales (de la localidad de Bermejo, que colinda con el municipio de Aguas Blancas, en Orán) y Ariel Ledezma Salinas (de la ciudad de Tarija). Los dos jóvenes eran amigos y compañeros de colegio.
Fuentes del vecino país aseguraron que los restos de los malogrados jóvenes serán repatriados a Bolivia, donde serán sepultados.
Tras el doble crimen, tantos las autoridades argentinas como las bolivianas iniciaron las investigaciones para esclarecer el móvil del brutal doble homicidio, que se presume sería un ajuste de cuentas vinculado al narcotráfico, perpetrado por sicarios profesionales que operan desde hace un tiempo largo en la zona de Pichanal, Colonia Santa Rosa, Orán, Tartagal y Salvador Mazza, y también en la capital salteña.
Según el informe preliminar de la autopsia, ambos hombres perdieron la vida a causa de múltiples disparos de arma de fuego y se presume que sería una ejecución.
La fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Orán, María Soledad Filtrin Cuezzo, indicó en las últimas horas que se realizan numerosas tareas para identificar a los responsables del doble crimen, pero sin resultado alguno.
La presencia de familiares permitió la confirmación de las identidades de las víctimas, quienes residían en Bolivia, es decir que los fallecidos tenían identificación que hizo posible contactar a sus respectivas familias, un dato no menor.
Terror
Una fuente consultada anoche aseguró que todo tiene que ver con todo; dejando entrever que los últimos sucesos de ajustes de cuentas y los secuestros millonarios de droga en distintos puntos de tráfico son el hilo conductor de la violencia terminal.
Hasta anoche no había novedad alguna acerca de posibles sospechosos del brutal doble homicidio y del lugar donde habrían sido «ajusticiados».
Dos casos de ferocidad criminal
En noviembre del 2023, en Orán, a unos 50 kilómetros de la frontera fue ajusticiado el hermano del actual intendente de Aguas Blancas. El «Oreja» Martínez tenía antecedentes por droga. Su asesinato se ejecutó con un neto estilo de sicariato: lo acribillaron desde una moto. Aquel hecho permanece aún sin resolverse, como otros tantos en la zona caliente. Un caso similar ocurrió en Pichanal, donde decapitaron a un puestero. Los detenidos, jóvenes de la zona, proclaman inocencia y sostienen que son perejiles del sicariato.
Agregue un Comentario