Secuestros de objetos robados y códigos rojos en viviendas catalogadas como “aguantaderos”. Tensa situación se vivió en un operativo realizado en Villa San Antonio y Barrio Cefereino, que culminó con ocho allanamientos y dos detenidos producto de una investigación que lleva adelante la Policía desde hace más de un mes.
En comunicación con Aries, el comisario inspector Hernán Fernández explicó los ocho allanamientos simultáneos que tuvieron lugar en la zona del “Bajo”, entre el Barrio San Antonio y Ceferino, desde las calles, Delfín Leguizamón e Ituzaingó e Independencia y Los Infernales, entre otras.
Según lo informó, las actuaciones tuvieron lugar bajo la órbita del Juzgado de Garantías de Tercera Nominación y el juez Antonio Pastrana que libró la orden por la ola de robos calificados que se sucedían en la zona.
“Ya venimos operando en el lugar por esta modalidad de ruptura de vidrios, pero ahora una de estas personas dejó sus huellas y con el sistema SIBIOS (Sistema Federal de Identificación Biométrica para la Seguridad) y con el trabajo que hizo la Policía Científica se pudo levantar ese rastro”, contó el Comisario Inspector.
De este modo se logró identificar a uno de los implicados en los robos, producto también de una de investigación que se venía realizando dese hace más de un mes.
El comisario definió como un éxito el operativo, porque ya “tenemos a los autores detenidos, tenemos secuestros y los códigos rojos en los domicilio que son aguantaderos”, añadió el comisario.
Según lo explicó estas personas ya habían sido denunciadas previamente por extravíos y robos previos. “Tenemos robos en panadería, robos de celulares, de prendas, de una batería que está valuada en $2.000, sustracción en negocios, en un centro de estética, en sandwicherías y todo para adquirir sustancias estupefacientes”, lamentó Fernández.
Quedaron a disposición de la Justicia dos personas, pero las pericias continuarán para esclarecer la totalidad de los hechos.
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