Después de algunos meses de pax negociada, la tensión entre el kirchnerismo duro y Alberto Fernández volvió a escalar a niveles similares a los de mediados del año pasado y a los posteriores a las elecciones legislativas de 2021.
En una entrevista con el portal ultrakirchnerista El Cohete a la Luna, el jefe de La Cámpora detalló cómo fue la convivencia entre el Presidente y la vice en estos tres años de gestión.
«Es más dura con Wado (de Pedro), con Mayra (Mendoza), con el Cuervo (Larroque), conmigo, ahí es más picante… Pero a Alberto jamás le gritó. Ahora, ¿es firme en las discusiones? Claro que sí,», lanzó, comparando la forma de vincularse entre Cristina y Alberto, por un lado, y con dirigentes de La Cámpora, por el otro.
Máximo redobló el ataque contra la Casa Rosada, en ese sentido, declarando que «fue el propio Gobierno el que instaló esas versiones». Dijo también que «ahora ponen todos cara de distraído y no es así», y agregó que le «costó mucho trabajar ese vínculo, estar, y lo hice entre otras razones porque quiero que las cosas salgan bien».
Sin dar nombres, el diputado del Frente de Todos fue muy duro con «personajes menores, que aparecen, sin ningún tipo de discusión política, formación ni humildad, y ahí la cosa se empieza a empiojar a pesar de lo que trabajamos para que no sucediera».
Y agregó: «Me extraña mucho del compañero Presidente, que fue tan crítico del gobierno entre 2010 y 2015, cuando nos iba mucho mejor en términos económicos, que ahora esté tan cerrado a la voz de otro compañero, que aparte se rompió el lomo para que sea Presidente».
En otra parte de la entrevista, Kirchner se dedicó exclusivamente a defender a su madre de las numerosas causas judiciales que afronta. Y lanzó una declaración desafiante hacia el rol del Poder Judicial: «Con la Justicia que tenemos, si Cristina quisiese presentarse a las elecciones le sacan la condena firme en cinco minutos». La referencia apuntaba al expediente de Vialidad, en el que Cristina fue condenada a seis años de prisión e inhabilitada para ejercer cargos públicos, pero que todavía no fue validado por un tribunal superior.
«Pensaron que el escarnio y la estigmatización a la que sometieron a Cristina entre el 2016 y el 2019 iban a sacarla de la cancha. La hicieron dar testimonio en ocho causas el mismo día. Creyeron que iba a alcanzar con eso, con desgastarla, maltratarla, asustar a todo el que se acercara. Pero les salió mal y se ganó la elección en el 2019. Lo cual transformó a Macri en el primer Presidente no reelecto: un tipo que tuvo la suma del poder público y privado, a quien el FMI le dio 45.000 palos verdes, que usaba el el Poder Judicial a piacere y también a los servicios para espiar», disparó Máximo, fortaleciendo sus dardos contra la Justicia y el gobierno de Cambiemos.
Fue allí donde volvió a aprovechar para pegarle al Presidente. «Quien tiene un rol fundamental en este asunto, que no puede esquivar, es Alberto Fernández, Presidente de la Nación y además presidente del Partido Justicialista, más allá de nuestros debates, discusiones y diferencias. La responsabilidad -que él decidió asumir, porque no fue obligado al lugar donde está- está en sus manos», le endilgó en la entrevista.
Renegociación con el FMI
En otro tramo, Kirchner habló de la necesidad de conformar una mesa política para sentarse a debatir en la que se plantee una renegociación del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y pidió rever el acuerdo con el FMI.
«Esa curva de vencimientos sólo va para arriba en el tiempo, y esos dólares que tenemos que mandar al FMI son los que le faltan a nuestras empresas», señaló.
Fuentes de Casa Rosada vinculadas al Presidente buscaron bajarle el tono al conflicto. Y repitieron, con fastidio, una idea que preocupa de cara al año electoral. «Esta estupidez de la interna, lo único que hace es sacarnos posibilidades en las elecciones. Tuvimos una semana espectacular con la CELAC y no lo aprovechamos», sostienen.
Y ven una oportunidad política en el contexto actual. «Ahora que tenemos desordenado a Juntos por el Cambio le damos de comer. Larreta no levanta, se pone nervioso, Bullrich esta mejor que él pero no tiene su estructura, Macri va y viene», resumen sobre la interna cambiemita.
«Wado» reavivó la interna K
La antesala de las críticas a Máximo Kirchner se dieron en el cierre de una semana en la que quedaron expuestas diferencias entre el presidente Alberto Fernández y el ministro del Interior «Wado» de Pedro». Si bien no lo dijo él de su propia boca, desde el entorno del funcionario se quejaron de la «falta de códigos» de Fernández por no invitarlo a un encuentro con Lula da Silva y representantes de organismos de Derechos Humanos, que se dio en el marco de la cumbre de la Celac, a la que asistió el presidente de Brasil.
El sábado, fue el ministro de Seguridad Aníbal Fernández el que salió en defensa del Presidente. “Me parece un horror lo que dijo Wado. ¿Desde cuándo le tiene que dar el Presidente explicaciones a él?», sostuvo Aníbal, en una entrevista radial con AM 750.
Aníbal fue más duro con su par de gabinete. «Si quiere competir, compite. Se pone en la vereda de en frente. Lo que hay que aclarar es que de una vez por todas hay que dejarse de embromar, los presidentes peronistas son elegidos por la voluntad popular, nunca ha sido de otra manera. Y cuando el presidente peronista ejerce, del otro, si no gusta, hay que cerrar el pico y ponerse a laburar», acusó.
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