«La Policía tendría que haber actuado de oficio. Hay una fiscalía contravencional también, pero no hubo ningún tipo de control y no hay un acta que se haya labrado en relación a esta ley. No hubo decomisos pese a que la pirotecnia sonora se vendía en todos lados», dijo Santiago Pedroza, abogado que ofreció una conferencia de prensa junto a organizaciones que representan los derechos de las personas con autismo, los animales y veteranos de guerra.
Pedroza recordó que el año pasado se aprobó la ley que prohíbe los fuegos artificiales que producen estruendo, por lo que solo deberían utilzarse los lumínicos, pero dijo que no hay un organismo de aplicación que se ocupe de que se respete.
Denuncia
«Hicimos una denuncia penal a los que vendieron estos productos en cantidad y también por incumplimiento de deberes de funcionario público a los que debían hacer cumplir esta norma», manifestó Pedroza, que además destacó que hubo incumplimiento por «negligencia».
«Luchamos muchísimo para que salga esta ley, hasta que se aprobó el año pasado pero sigue sin cumplirse. Necesitamos que se respete porque le están haciendo daño a muchas personas», señaló Ada Sánchez presidenta de la asociación Familia TEA Salta (padres de niños con autismo)
En tanto, Roberto Raúl Carabajal, veterano de Malvinas, expresó que para él es un trauma tener que soportar los estruendos en esta época del año por las secuelas que le quedaron de la guerra.
«Seguimos sufriendo las consecuencias de recordar los bombardeos. En el barrio El Huaico fue impresionante la cantidad de pirotecnia que se tiró. Lo único que había que hacer era dar cumplimiento a la ley», lamentó.
Carabajal destacó que los fuegos artificiales se vendían en la calle pese a la prohibición. «Se habla mucho de reivindicar a los veteranos, nos dieron un diploma por los 40 años de la guerra, ¿pero eso de qué sirve si no se cumple la ley? De una manera u otra es volver a recordar lo que viviste y a los amigos que perdiste», dijo.
Santiago Pedroza insistió en que se debe informar qué medidas tomó la Policía y qué órdenes se impartieron para que no se vendiera pirotecnia sonora y afirmó que los responsables deben dar explicaciones.
La norma
La Cámara de Senadores de Salta aprobó en septiembre de 2022 la ley que prohíbe el uso y venta de elementos explosivos sonoros.
El proyecto fue impulsado, entre otros sectores, por familiares de personas con trastorno del espectro autista (TEA)
La norma impide el uso, tenencia, comercialización, manipulación, fabricación, acopio, exhibición, expendio mayorista o minorista de todo elemento de pirotecnia con efectos audibles o sonoros.
Entre otros, los elementos prohibidos son las bombas de estruendo, rompeportones, cohetes, luces de bengalas y petardos.
La ley también plantea como objetivo la concientización, información, difusión y educación de la población para evitar los altos riesgos derivados del uso de pirotecnia sonora y los efectos negativos en personas vulnerables, animales y el ambiente.
Mascotas
Luciano Simkin, subsecretario de Bienestar Animal de la Municipalidad de Salta, informó ayer que en Año Nuevo atendieron a cinco animales heridos como consecuencia de los fuegos artificiales.
El profesional destacó que, si bien se tiró pirotecnia, el año pasado fueron más de 20 las mascotas heridas y consideró que eso se debe a que muchas personas están tomando conciencia de la necesidad de proteger a los animales.
«Creo que mucha gente está comenzando a comprender de a poco que hace falta un cambio. La baja fue significativa. Esperemos que cada vez haya muchas más luces y menos ruidos», sostuvo el profesional.
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