El equipo merengue sufrió para ganarle al Elche, al que pudo superar gracias a un yerro del ex Boca, Axel Werner.
La historia de Cenicienta parecía escribirse en Alicante. Pero sobre el final el hechizo se rompió. Elche había logrado estirar la definición ante Real Madrid al tiempo extra. Y no solo eso, se había puesto en ventaja ante el gigante español que quedaba con un pie afuera de los octavos de final de la Copa del Rey.
Pero sobre el final llegó la remontada merengue y la polémica.
A cinco minutos del final del segundo tiempo extra, el arquero argentino Axel Werner salió lejos en su afán de cortar la pelota larga del ataque del Real Madrid. Pero calculó muy mal. Y lo pagó caro.
El belga Eden Hazard no lo perdonó. Llegó primero, punteó la pelota, gambeteó a Werner y tocó al gol cuando el reloj ya marcaba 115 de juego.
Así, el Madrid que estaba con un jugador menos por la roja a Marcelo daba vuelta un partido emotivo. Aunque faltaría un momento polémico en la última bola, cuando ya en el tiempo adicional el árbitro anuló lo que era el empate de Elche anotado por Fidel, al considerar que hubo falta previa de Verdú a Lucas Vázquez.
El encuentro había terminado igualado sin goles en los 90 minutos. Y todo ocurrió en el tiempo extra: la roja al lateral brasileño, el gol de Verdú para poner arriba al Elche y el empate transitorio de Isco que devolvía la esperanza a un Madrid que terminó celebrando una clasificación más sufrida de lo esperado.
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