Con una sugestiva modificación que obligará a postergar por al menos una semana su sanción, la mayoría del Frente de Todos aprobó en el Senado el proyecto de ley de presupuesto nacional para el próximo año, el primero presentado por la administración de Alberto Fernández.
El cambio introducido por el oficialismo, para subsanar un error en una planilla con obras públicas, impidió que el proyecto pudiera convertirse en ley en la Cámara alta.
De esta manera, el ministro de Economía, Martín Guzmán, vio frustrado su plan de alcanzar la sanción de la norma mientras se encuentra en el país la misión del FMI renegociando los US$ 44.000 millones de la deuda que la Argentina mantiene con el organismo.
El proyecto fue aprobado por 45 votos a favor, 2 en contra y 23 abstenciones. Junto al oficialismo, apoyaron el presupuesto los aliados provinciales Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro) y Magdalena Solari Quintana (Frente Renovador de Misiones).
Los únicos votos en contra fueron los del peronista salteño Juan Carlos Romero (Interbloque Federal) y Claudio Poggi (Juntos por el Cambio-San Luis).
La oposición votó dividida, y así replicó el escenario registrado cuando el proyecto se aprobó en la Cámara de Diputados, en la madrugada del 29 de octubre.
En ese sentido, los jujeños Silvia Giacoppo y Mario Fiad, que responden al gobernador radical Gerardo Morales, y el correntino Pedro Braillard Poccard, apoyaron el proyecto.
La gran mayoría de Juntos por el Cambio se abstuvo «como una señal ante el primer presupuesto» presentado por el gobierno de Alberto Fernández, según explicó el jefe del principal interbloque opositor, Luis Naidenoff (UCR-Formosa).
Más allá de ese gesto, los senadores de Juntos por el cambio cuestionaron en duros términos la gestión económica del Gobierno y el proyecto de presupuesto.
«Este es un presupuesto de ajuste», denunció Naidenoff. «La variable de ajuste pasa por 8,9 millones de argentinos que no van a cobrar el IFE», agregó.
En el cierre del debate le respondió el jefe de la bancada oficialista, José Mayans (Formosa), quien calificó de «oposición cínica» las críticas de la bancada de Juntos por el Cambio al manejo de la economía.
«Lo que ha hecho este Gobierno es sostener con solidaridad al pueblo argentino», sentenció el líder del bloque oficialista, haciendo hincapié en los efectos que la cuarentena por la pandemia de coronavirus provocó en la economía argentina. Además, dijo que el Gobierno «solucionó el problema de la deuda» con el FMI tomada durante la administración de Mauricio Macri.
El peronista disidente Juan Carlos Romero criticó los aumentos de impuestos, tasas y aranceles destinados a financiar áreas manejadas por funcionarios que responden el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa.
«No sé qué campaña están tratando de financiar los diputados. Es increíble que esto se haya dejado pasar», sentenció. El salteño también denunció que el presupuesto contempla «un ajuste a los jubilados».
El tema de la deuda tomada en el gobierno anterior y los efectos de la pandemia habían sido el eje de la defensa del proyecto que realizó el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Carlos Caserio (Frente de Todos-Córdoba).
«Se tomaron medidas para defender a la gente, la vida de las personas, que no se cayeran las industrias», afirmó Caserio para justificar el aumento del gasto y la caída en los ingresos fiscales registrados desde marzo a la fecha.
Además, se mostró confiado en que el año próximo habrá «una recuperación gradual» por el aumento de la recaudación y el saldo favorable de 15.000 millones de dólares en la balanza comercial que prevé el presupuesto.
«El país no tiene problemas de reservas», agregó en dirección «a los agoreros mediáticos». «El Gobierno ya anunció que no va a devaluar», sentenció Caserio.
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