Optimizan un banco de datos de delitos contra las personas y la integridad sexual.
La secretaria de Justicia y Métodos Participativos de Resolución de Conflictos, Carina Iradi, se reunió con desarrolladores informáticos del Servicio Penitenciario y del Registro Civil de Salta, organismos que trabajan en la optimización de un sistema informático para almacenar y comparar perfiles genéticos. Esta herramienta se aplicará para el registro provincial de condenados por delitos contra las personas y contra la integridad sexual, según informó El Tribuno.
La funcionaria provincial dijo que se avanza a nivel tecnológico «sumando dispositivos de huellas digitales a los datos únicos de identificación genética, que otorga el registro, para avanzar en el almacenamiento y comparación de perfiles».
En Salta está vigente desde agosto la ley que creó esta base de datos, que está a cargo de la Secretaría de Justicia y Métodos Participativos de Resolución de Conflictos, y el banco de datos genéticos, responsabilidad del Ministerio Público a través del CIF (Cuerpo de Investigaciones Fiscales)
La Corte de Justicia envía al organismo del Ministerio de Gobierno, Derechos Humanos y Justicia la información sobre las sentencias condenatorias para su sistematización de manera continua.
La funcionaria indicó que contar con un registro ayuda a esclarecer hechos que son objeto de investigación en materia penal vinculada con delitos contra las personas y contra la integridad sexual cometidos en la provincia.
El sistema se enmarca en la Ley 7775 y prevé la extracción de material genético por parte del Servicio de Biología Molecular del departamento Técnico Científico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales, organismo que conserva la muestra.
Prevención
La cantidad de delitos contra la integridad sexual en la provincia preocupa a expertos de distintos organismos oficiales. La semana pasada, referentes del Observatorio de Violencia contra las Mujeres se reunieron con funcionarios de Salud para aunar criterios y garantizar que las víctimas accedan a la asistencia adecuada cuando recurren a los hospitales o centros de salud.
Durante el primer semestre del año pasado, 54 mujeres víctimas de violencia sexual se le entregaron kits de profilaxis posexposición para VIH, ETS y anticoncepción de emergencia.
Esta asistencia de urgencia posterior a una violación pasó de aplicarse 5 veces por mes en 2016 a siete por mes en 2017 y 9 en la primera mitad de 2018.
En 2017 fueron 84 las mujeres a las que se les proporcionó el kit y en 2016 habían sido 60, según estadísticas incluidas en el informe anual 2018 del Observatorio de Violencia contra las Mujeres.
Datos de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual (UDIS) revelaron además que entre 2017 y el primer semestre de este año hubo 1.703 denuncias por delitos sexuales: un promedio de 60 por mes.
Por abuso sexual simple se hicieron 725 denuncias en ese período; 510 están a caratular; 407 son por abuso sexual con acceso carnal; 39 por abuso sexual gravemente ultrajante; 18 por grooming y 4 por pornografía infantil.
Los especialistas en temas de género consideran que el incremento de casos puede estar relacionado con el trabajo que se realiza desde hace años para concientizar a las mujeres sobre la necesidad de denunciar.
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