Entregarán a la ONU los últimos pertrechos que estaban en manos de combatientes El grupo se desmovilizará y pasará a formar un partido político legal. Todavía quedan armas escondidas en la selva.
Siete meses después de la firma del acuerdo entre el Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ese grupo que surgió en 1964 para intentar tomar el poder dejará de ser una guerrilla y dará sus primeros pasos como movimiento político legal, segun informo La Gaceta.
El paso de la ilegalidad a la legalidad se concretará hoy en una ceremonia en la que se formalizará la entrega de la última parte de las armas a las Naciones Unidas, que las debe extraer de los campamentos para fundirlas y construir con ellas monumentos a la paz.
Las FARC empezaron el pasado martes el proceso de entrega del último 40% de su armamento. El proceso es complejo y se ha llevado a cabo de forma simultánea en 26 campamentos donde 6.800 miembros de las FARC y poco más de 2.200 milicianos (integrantes de redes de apoyo del grupo) están concentrados desde febrero, cumpliendo la fase de desmovilización.
Cada guerrillero entrega su arma de dotación, que debe ser registrada con su número de serie y otros datos por parte de los delegados de las Naciones Unidas. Acto seguido, el organismo entrega un certificado al ex combatiente, que firma un documento mediante el cual se compromete a no volver a tomar las armas y a cumplir el acuerdo de paz.
Ese procedimiento culminará hoy, con una ceremonia que tendrá lugar cerca del municipio de Mesetas, en el departamento de Meta, en el campamento con más guerrilleros: cerca de 520.
Allí acudirán el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y el máximo líder de las FARC, Rodrigo Londoño, quien poco a poco ha dejado de usar los alias de “Timochenko” y “Timoleón Jiménez” que lo identificaron como guerrillero, para encabezar la ceremonia junto con delegados de las Naciones Unidas.
El tramo final de la entrega de armas ha contado con la supervisión del secretario general adjunto de Asuntos Políticos de la ONU, Jeffrey Feltman, quien ha elogiado el cumplimiento del acuerdo de paz que Santos y Londoño firmaron en Bogotá el 24 de noviembre de 2016.
Otras armas, además de explosivos, están en alrededor de un millar de escondites cuya ubicación ya fue suministrada por las FARC a la Misión de Verificación de las Naciones Unidas, que espera tomar control de esos pertrechos antes de septiembre.
Esa tarea conlleva dificultades porque muchos de los escondites están en terrenos de difícil acceso y se requiere de coordenadas exactas para ubicarlos.
Transformación
Líderes de las FARC aseguran que esta etapa del proceso de paz no significa la muerte de ese grupo, sino su transformación en un sector político legal.
“Las FARC no se acaban hoy, se transforman, se convierten en una organización legal que pronto va a conformar un partido que sale a la acción política. Nosotros no nos vamos a desmovilizar, nos vamos a movilizar hacia la legalidad”, advirtió Seusis Pausivas Hernández, conocido con el alias de “Jesús Santrich”.
Los plazos del cronograma de implementación del acuerdo de paz se han modificado varias veces, aunque las partes han coincidido en que se trata de algo normal por la complejidad del proceso que busca acabar con 53 años de confrontación.
Tras la entrega de armas, los miembros de las FARC pasarán a la etapa de desmovilización y de sometimiento a una Jurisdicción Especial de Paz para solucionar sus problemas con la Justicia, en una fase que se extenderá durante varios meses. (DPA)
Agregue un Comentario